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Amante peligroso

Capítulo 44: La desvergüenza sin precedentes

Al terminar el trabajo, regresó sola, andando por la carretera nocturna como siempre.

Naturalmente, era imposible que Macaria la acompañara.

Cuando volvió a la residencia, Denis se sorprendió al ver que las luces estaban encendidas en el salón, y que Macaria estaba sentada encima de ese sencillo sofá jugando con su móvil.

Cuando Macaria notó su llegada, dejó inmediatamente el móvil y se puso de pie, diciendo

-¿Volviste?-

Denis se quedó más sorprendida, puesto que Macaria hoy estaba sentada allí esperándola en vez de haberse metido en su habitación para dormir como de costumbre. De este modo, solo respondió con la palabra

-Sí-

Tres años en prisión le había transformado en una persona muy callada, que tenía poco que decir. Mantenerse silenciosa era su estado normal.

-He oído hoy que hay un invitado en la habitación VIP de la sexta planta que te había pedido específicamente ir allá. ¿Quién es?-

¿Y eso? ¿Se trata de una charla entre amigas? Preguntándose así, Denis levantó las miradas para examinar bien a Macaria, luego se rió de sí misma con una voz interior

“¿Cómo es posible?”

-Es...un cliente nuevo- habló lentamente, pero sabía perfectamente que Macaria solo quería preguntar si ese invitado era Norberto.

-Así ...- soltó un suspiro de alivio, y luego de repente observó a Denis con miradas muy penetrantes, interrogando

-¿Sobre la lesión en tu frente, lo has contado a los demás?

Denis solo se sentía cansada, muy cansada.

Estaba cansada del interminables tientos de Macaria, de sus inacabables interrogatorios. ¿Hasta cuándo todo eso podría terminar?

Cerró los ojos, los abrió de nuevo y miró a Macaria:

-Tú eres una de los alumnos más sobresalientes de la Universidad Santo, mientras que yo solo soy limpiadora que no ha terminado los estudios en el bachillerato. Somos de dos mundos distintos. Vivimos en la misma residencia solo por la disposición de la empresa.

Somos tan diferentes, entonces, es mejor que mantengamos una distancia adecuada y no interfiramos en los asuntos ajenos-

-Denis, ¿cómo puedes hablar así? ¡Es el colmo!...-

Antes de que Macaria terminaran las palabras, se había quedado estupefacta al ver que esta débil y silenciosa mujer pasó por ella cojeando y entró en su habitación sin mirarla.

Al instante, una cara bonita se puso roja, blanca, luego verde, tan colorida como una paleta. Todo eso resultó tan maravilloso e interesante.

Mirando la puerta bien cerrada, Macaria sintió que la ira en su interior le había derramado.

¿Acaso las palabras de esa mujer coja no significaban que Macaria no tenía nada que hacer y estaba creando problemas? ¿Además esperaba que Macaria la dejara en paz ?

-Bien, bien, bien, Denis. Tú ya te consideras superior a los demás por haberte incorporado al departamento de relaciones públicas. Ahora sabes hablar de una manera astuta. Si de verdad eres tan recta y honrada, ¿por qué aún trabajas en Emperador Internacional?- Macaria estaba tan enfadada que corrió hacia la puerta de la habitación de Denis y gritó con rabia. Luego se dio la vuelta y entró en su habitación con un resoplido.

Denis se apoyó en la puerta y se deslizó lentamente hacia abajo. Por fin, todo se volvió tranquilo.copy right hot novel pub

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