-Posadera, ¿no es tu apellido García?- Regina siguió y le preguntó con cuidado, -¿Por qué te llaman Denis Alonso?-
En la puerta de su habitación, Denis se detuvo y miró a Regina a su espalda. Había miedo en los ojos de la chica, y Denis se dio cuenta de que Regina ya no se mostró inocente como antes, sino se volvió tímida.
-Regina, me tienes miedo, ¿verdad?- Denis no contestó la pregunta, sino le preguntó.
El rostro inocente de Regina que se puso rojo, como el trasero de un mono, estaba lleno de vergüenza y dijo, -¿Cómo podría tener miedo de ti? Eres la mejor.-
Una mano fría acarició el rostro de esta chica, y ella se estremeció, le levantó párpados con cuidado mirando secretamente a su jefa, pero vio sus ojos tristes, profundos e angustiados y le dijo, - Jefa ...-
-Regina, también ahora no sé cuál es mi nombre.-
-Cuando nací, mi abuelo me dio el nombre de Denis Alonso porque el apellido de mi abuelo era Alonso y mi padre también. Yo soy la hija de la familia Alonso.-
-Posteriormente mi abuelo falleció y ofendí a alguien que no debía. Desde entonces Denis Alonso ya no perteneció a la familia Alonso.-
-Más tarde, me dieron el apellido García, y me dijeron que me llamaría Denis García.-
-No sé qué me llamo, pero si me llamas posadera, me siento más cómoda.-
Secó las lágrimas del rostro de Regina y dijo, -Buena niña, ¿por qué lloras?- Después de un momento, Denis entró en el dormitorio, y luego agitó la mano a Regina diciendo, -Ven aquí, también.-
Después de hablar, abrió la caja fuerte en la esquina y cuidadosamente sacó una cartera, -Regina, siéntate.- Denis dijo.
Mientras trataba a Regina, se sentó en una silla a su lado y abrió la cartera que tenía en la mano. -Si un día me muero primero, puedes llevar estos documentos para buscar al abogado Iván Ramírez del Bufete de Abogados de Justicia.- Denis dijo.
-La Casa de Memoria es muy importante para mí. Incluso es más importante que mi vida. Si me voy en el futuro, no podrás llorar tanto. Ayúdame a cuidar de este hotel. Denis le ordenó.
No importaba lo inocente que fuera Regina, también notó la anormalidad de las palabras, -Posadera, quieres... irte de aquí, ¿verdad? Siento que estás pronunciando un testamento.- Regina inquirió.
-Ay, son tonterías, ¡qué tonta soy yo! ¡Vivirá para siempre!- Regina se consoló consigo en su corazón.
Denis se puso de pie y le dijo, -Te llevo a un lugar.- Sin explicar la duda deRegina, Denis tomó la carpeta en su mano y salió por la puerta.
-Posadera, ¿a dónde vas?-
La mujer caminó al frente, con un poco de prisa, torpemente. Y le Regina dijo ansiosamente, -Posadera, ciudado, no tengas prisa.-
Siguiendo a la jefa, Regina se detuvo frente a una casa que se encontraba en el rincón más remoto de la posada.
-Posadera, ¿no sueles evitar que nos acerquemos a aquí?-
Denis no la respondió sino abrió la puerta con la llave. La puerta se abrió con un crujido. El interior de la casa estaba un poco oscura. Se encendió la luz. De repente se iluminó toda la habitación.
De repente, Regina gritó asustada y dijo, -La…foto del difunto…-
-Regina, no tengas miedo.-
-Se llamaba Karin quien fue una chica muy muy amable como tú.-
Denis se adelantó para encender la lámpara, luego le ofrendó el incienso a Karin y dijo, -Karin era muy amable, tan amable que perdió la vida por salvarme.-
-Karin se tendió en mi pierna con los ojos bien cerrados.-
-Antes de cerrar sus ojos, todavía estaba hablando de su anhelo por este mundo.-
-Ella me dijo que le gustaba el cielo y la tierra del Mar Fresco y la Montña Sagrada de Nieve en la distancia.-
-El deseo de toda su vida fue abrir una posada pequeña en la orilla del Mar Fresco donde la vida fuera libre y pacífica, sin disputas seculares.-
-Ella falleció sin poder realizar su sueño. Me salvó con su propia vida, por eso su deseo es el deseo de toda mi vida.copy right hot novel pub