“Dicen que la única elección entre el amor y la guerra, es cual te va a matar primero”

Pauala Crovell

Para Eliza, saber que Diego está enamorado de otra mujer, y que su exposición está totalmente dedicada a ella, le genera un caos emocional muy fuerte. Siente tristeza al ver que él no la ama, pero también siente celos y odio en contra de esa mujer que es capaz de robarle la posibilidad de ser feliz con Diego.

Luego del almuerzo, se retiran a sus habitaciones. Ella permanece si decir ni una palabra. Suben al ascensor, llegan al pasillo.

–¡Qué descanses!– finalmente dice.

–¿Te ocurre algo? ¿Estás molesta? ¿Dije algo errado durante la entrevista?

–¿Quieres que hablemos? Entra a mi habitación– abre la puerta y le señala con su mano para que él entre.

Diego accede a conversar, quizás es hora de hablarle sinceramente sobre su relación con Karem. Sabe que desde que dio esa respuesta, Eliza cambió drásticamente. Es mejor enfrentar eso de una vez. Lo que siente por Karem supera cualquier inconveniente que pueda generarse luego de su conversación.

–¿Qué es lo que ocurre?– dijo sentándose en el sofá.

–¿Qué esperabas para decirme que tienes a alguien en tu vida y no soy yo?

–Siéntate, así es difícil hablar– le dijo, haciéndose a un lado para que ella se sentara.

La tomó de ambas manos, ella lo mira fijamente. Debe controlar su ira, lo cual no suele serle muy fácil. Pero por ningún motivo le dará razones para que él se decepcione de ella.

–Karem llegó a mi vida sin esperarlo.

–¿Karem, dices? ¿La novia de tu hermano?

–¿Me dejas explicarte?

–¡Sí! Continúa.

–Yo la conocí por las redes y poco a poco fuimos haciéndonos más íntimos, por eso mi obra se llama Musa Virtual, su imagen provocó en mí, inspiración y sin darme cuenta me enamoré de ella. Te estoy hablando de menos de dos meses.

“Es reciente, entonces; no será difícil de derrotar” pensó.

–Nunca llegamos a vernos, salvo el día de la exposición, que ella llegó con mi hermano. No sabes cómo me sentí al verlos juntos. Hasta esse momento di por finalizada mi historia con ella.

–¿Querías vengarte por lo que te hizo él, con Antonella?

–¿Qué carajos dices?– respondió irritado y soltó sus manos.

–No te enfades conmigo. Era sólo una pregunta. Recuerdo que me contaste sobre esa situación.copy right hot novel pub