Veo que Barry se impresiona por mis palabras pero no me importa su expresión, si no la de la tipa ésta, se a quedado pasmada por mi arrebato y para que sea que no soy ninguna de su su amantes, obviamente, por si le quedaba la duda en su pequeño y feo cerebro de vendedora puta.
-Oh, ¿así que ella es tu esposa?-susurra analizandome completamente, me mira de arriba a bajo,¿entonces que pensabas? ¿Que era una de tantas?
-Y bien, ¿que nos puedes decir de la casa señorita no sé qué?-cambio el tema bruscamente pero ya no quiero estar escuchando su voz llena de rabia y malas vibras, esperó que laboralmente se concentre y deje su odio.
-Pues...-Se aclara la garganta y empieza a hablar de todo lo que tiene la casa;lámparas, detalles, habitaciones, todo-Ésta casa es perfecta para una familia-sé que le costó decir lo anterior.
-Entonces es perfecta, Barry, perfecta para el bebé -miro la cara de Cintya, está atónita, asustada e incrédula, tomaaa esa perra.
-Ah...sí, claro Kelly, así es-murmura Barry muy incómodo, la señorita no dice nada e ignora mis palabras pero se voltea de prisa y mira a Barry acusadoramente.
-¿Ella es tu secretaria verdad?-me lanza cuchillos con la mirada pero de todas maneras no quito la sonrisa de mi bello rostro, i'm queen.
-Lo era, pero ahora es mi esposa, y ya no queiro seguir hablando de mis asuntos personales, así que prosigue con todo ésto.-La voz de mi "esposo" es tranquila pero demasiado fuerte.
Media hora después Cin... No sé qué nos da el recorrido completo, y nos habla de la buena inversión que se hará, pero a mí sinceramente lo único que amé de todo ésto es la maldita expresión de ella cuando Barry pasaba su brazo por mi hombro o cuando le tomaba de la mano.
-Bueno, mañana mando el dinero a la cuenta-me suelta de la mano para después ofrecérsela a Cintya, ella hace ademán de besarlo en la mejilla en vez de tomar su mano pero Barry da un paso hacia atrás, finalmente ella se resigna y se despide de mi esposo,-nos vemos.
-hasta luego-digo sin acercarme a ella ni nada.
Salimos de la casa sin decir ni una sola palabra, ésto realmente fue incómodo, pero a quien le importa lo que esa tipa hubiera pensado, lo importante es que la dejé en su lugar.
-Y entonces... Señora Freeman, ¿que le pareció la casa?-dice Barry con una sonrisa.
-Esta bien, supongo. -No sé porqué me siento nerviosa, si no debería.
-¿Supones?¿por qué supones?
-¡Que sí, es perfecta!-no sé porqué grité pero ahora estoy más tranquila.copy right hot novel pub