KELLY
Mi corazón late desembocado, la excitación que siento es casi dolorosa.
Barry está entre mis piernas ejerciendo presión. Todo mi cuerpo está temblando. Estoy apunto de rogarle para que me toque, quiero y necesito sentirlo.
-Hoy no, Kelly-automáticamente mi cuerpo se frota más contra el suyo.
-¿Por qué no? -pregunto algo nerviosa.
Despertar abruptamente no está bien. Aún tengo la maldita sensación de excitación en mí cuerpo. No puede ser que éste haya sido un sueño, se sintió tan real.
¿por qué siento ésto? ¿Por qué me siento tan necesitada de atención y placer? Ya pasaron seis días desde que estuve en el hospital, y por muy extraño que parezca ya no quiero que Barry se me despegue, me encanta que me haga sentir bien y que me dé atención. Pero mañana se irá a trabajar y ésto se acabará. No quiero que me deje sola, se ha portado tan bien que ya me acostumbré a él. De un sólo jalón logró tirar todas mis sábanas, tengo demasiado calor.
-Necesito de ti, Barry--murmuro lentamente. Él no está aquí pero quisiera que me escuchara. Salgo de la cama despacio, prendo la luz y busco mis pantuflas, quiero ir a su habitación pero no lo sé.
¿Y sí me rechaza? ¿Y di si quedo en ridículo?
Salgo de mi habitación lentamente, no quiero hacer ruido, además ayer fui al doctor y me aseguró que todo está en orden con los bebés y que puedo seguir con mi vida. Abro la puerta de la habitación de Barry, no me preocupo por interrumpirlo porque no creo que esté despierto. Ya aprendí que Barry es un hombre que valora sus horas de descanso y no las desperdicia desvelándose, como yo.
No prendo la luz, si no que camino hacia la mesita de noche y enciendo la laparita, no quiero que se despierte aún. Está apoyado en el lado izquierdo de la cama, la mejilla la tiene ligeramente aplastada, le tengo un poco de envidia, tiene la cara tan perfecta y su cabello rubio natural se ve tan sedoso y despeinado.
Dudo en tocarlo o mejor irme pero no le echaré atrás, estoy aquí y debo de cumplir mi meta. Me siento en la orilla de la cama, ésta se hunde y él se mueve, quiero tocarle el cabello y que sienta mi presencia.
-¿Kelly?-murmura con voz ronca.
-Sí, soy yo-susurro lentamente.
-¿Te pasa algo?-se recompone rápidamente.
-Estoy bien-digo algo incómoda, ¿como le digo la razón por la que estoy aquí?
-¿No puedes dormir?-mira el reloj y después a mí, son las 3:46
-La verdad no, ¿puedo dormir aquí?-¿y después aprovecharme de ti?
-Sí, puedes dormir conmigo-se mueve para darme espacio. Me recuesto y los dos quedamos cara a cara.-¿Como están mis desconocidos?-toca mi vientre con mucha ternura.
-Bien, supongo que con ganas de estar cerca de papá -sonrío.
-Supongo que por eso no puedes dormir -me da un pequeño beso en el vientre. -Oye, ya está todo listo para la compra, antier deposité el dinero.
-¿De qué?-¿dinero de qué o qué? Barry despilfarrando dinero.copy right hot novel pub