Lien se detuvo con una exclamación ahogada cuando el rostro del hombre se hizo visible. No era Dominic, sino Leo y al darse cuenta de ello se le erizo hasta el ultimo vello de su cuerpo. Tenía los ojos vidriosos y percibió al instante que el aliento le olía a licor o alguna otra bebida aún mas fuerte que el champagne.

-Quédate Lien, no te vayas aún. Deseo que sepas lo mucho que significas para mi -murmuró él arrastrando las palabras y acercándose al cuello de Lien.

- No Leo, ya quedó todo más que aclarado entre nosotros. Lo nuestro ya está sepultado. Tú estas haciendo tu vida y yo necesito rehacer la mía.- Respondió ella tratando de soltarse del agarre de Leo.

-Con quien? Con ese tipo?- Pregunto con un tono burlón.- Ese hombre tendrá mucho dinero pero jamás te amara como yo. Ni te besará, ni te tocará, ni te hará el amor como yo.- Exclamó Leo sobre el costado de su rostro haciéndole sentir el calor que emanaba de su cuerpo.

-Pués que pena, pero ya lo hizo. Dominic tiene por completo mi corazón. Y déjame decirte que no le llegas ni a los talones. Evita pasar vergüenza y mejor déjame en paz.-

-No me digas eso amor, yo sé que aún sientes algo por mi. Te deseo todo el tiempo Lien, extraño tu dulce boca, tu cuerpo...-Murmuró sin soltarla y su semblante se volvió tenso.- Vamos gatita mira como me tienes.- Dijo tomándole la mano para llevarla hacia su miembro erecto.copy right hot novel pub