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CUÁNTO TIEMPO

Capítulo 7: No sé de qué me hablas

—De... —Los ojos de Elizabeth estaban en pánico y antes de que viera el rostro del hombre que tenía delante, un beso cayó sobre sus labios, arrebatándole el último juicio que le quedaba.

Mientras la lengua del hombre invadía su boca, Elizabeth se quedaba atónita.

—¿Me has dejado ver ese libro y esa palabra deliberadamente? Elizabeth, ¡dime el propósito de tu regreso! ¡¿Por qué has vuelto?! ¡¿O es que de verdad crees que te doy tanta importancia como para olvidar el daño y el sufrimiento que me hiciste sentir hace siete años?!

Las manos del hombre la apretaban tan fuertemente su cintura como si quisiera romperla en pedazos, dejándola inmovil.

—¡No sé de qué me hablas!

El cuerpo de la chica se estaba quedando sin fuerzas por el feroz forcejeo del hombre, que no pudo evitar jadear.

—¡Suéltame, Declan! ¡He dicho que me sueltes! ¡Estamos en tu oficina!

Sin embargo, su resistencia no era nada para Declan, porque sin ningún esfuerzo inmovilizó la rodilla levantada de Elizabeth, para luego colocarse entre sus piernas.

—¿Qué pasa si estamos en mi oficina? Ja… ¿No decías que querías hacer el amor conmigo en todos los sitios de Ciudad Río? Si no recuerdo mal, ¡aún no lo hemos hecho en la oficina!

Su tono lleno de sarcasmo iba en acompañamiento de una risa aterradora e insensible. Mientras tanto sus manos no paraban de acariciar las piernas de Elizabeth.

Ella sintió un frescor en las entrepiernas, entonces notó que Declan le había subido la falda hasta la cintura. Bajo las medias de color carne, se podían ver las bragas de seda de tonalidad morada.

Un deseo apasionado apareció en los ojos de Declan.

—Hasta has cambiado de estilo. ¿No te gustaban las bragas con estampados de dibujos animados? ¿Ahora eres sexy?

Bajando la voz a propósito, le susurró al oído, a la vez que su cuerpo se acercaba más y más a ella.

—Veo que has cambiado mucho en los últimos siete años… Me gustaría saber si esa parte también ha cambiado. ¿Qué tal si me dejas comprobarlo?

Cuando su boca se acercó a su cuello, rompió el cuello de su camisa sin mucho esfuerzo.copy right hot novel pub

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