Él tomó todas las culpas sobre sí mismo, pero en realidad, ¿qué había de malo?

¿No era natural que algo así ocurriera cuando estaban enamorados?

El que tenía la culpa no fue Angelo, sino ella.

-Yo... Tengo que ir a la escuela y ya me tengo que levantar.-

Mauren bajó la cabeza, arregló el botiquín, se dio la vuelta y entró al baño.

Después de lavarse, miró la cara pálida en el espejo, apretando el puño con fuerza.

“¡Mauren, no puedes seguir siendo tan vulnerable!” se dijo en su corazón.

Este estado no sólo lastimaba a sí misma, sino también a las personas de su alrededor.

¡Senda no era más que un demonio en su corazón, y ella debería vencerlo!

“¡Anímate! ¡No puedes continuar con la depresión!”

Ella dio unas palmaditas en su cara, trataba de sacar una pequeña sonrisa ante la persona en el espejo.

Cuando salió del baño, Mauren se había calmado y relajado, -Vamos, hay clases por la mañana.-

*

Esta belleza había regresado a la clase, lo que era realmente una cosa rara.

Cuando los chicos veían a Mauren, parecían como si las abejas vieran el polen.

-¿Mira, cuando estabas fea, todos te rechazaban, ¿y ahora qué? ¿la chica más bella de la clase?-

Liz susurró, con una cara de desprecio, -Estos chicos someros.-

Mauren no tenía nada que decir al respecto, ya que se había acostumbrado a tales cosas.

Cuando estaba a punto de empezar la clase, Analola se apresuró a venir de afuera.

-Mauren, después de la clase, vayamos a la universidad Río.- Dijo ella, jadeando.

-¿Por qué?- Mauren estaban preparando sus libros para la clase.

Analola susurró y dijo, -La universidad Río está llevando a cabo una feria de beneficencia, ¡hay muchas cosas buenas y baratas!-

-¡Vaya! Las chicas de esa universidad son de grandes familias, cada año hay muchos productos de gran marca en la feria.-

Al escuchar esto, Liz se emocionó, -¡Me enteré de que muchos de ellos son totalmente nuevos!-

-Sí, todos eran por los puntos de la venta de las clases, muchos de ellos compraron productos nuevos y los llevaba a la feria de beneficencia a bajo precio.-

Ellas estaban de primer grado en este año, y era la primera vez que tuvieron la oportunidad de conocer la legendaria feria de beneficencia de la universidad Río.

Analola había estado esperando por mucho tiempo para esta feria, de todas maneras, los millonarios no se preocupaban por perder dinero, sólo querían los puntos.

¿Qué pasaría solo perdiendo un poco de dinero?

Con lo que se había comprado, había ganado.

-Pero, ¿no era que la feria no se celebre hasta la próxima semana?- Liz la tiró hacia abajo.

Al ver que el profesor entraba, Liz susurró y dijo, -Me dijeron que era la semana que viene.-

-Acabo de enterarme de que un súper rico ha llegado a la universidad Río y ha dicho que va a donar un edificio para laboratorios.- Analola también bajó la voz y no se atrevía a dejar que el profesor que estaba en el estrado se diera cuenta de la charla.

-Decidieron provisionalmente que la feria se llevará a cabo hoy por el súper rico.-

-¿Qué hombre es tan poderoso?-

-¿Quién sabrá? De todos modos, no falta gente rica en la Ciudad Norte.-

Viendo a Mauren completamente insensible, Liz suavemente tiró una esquina de su ropa, -¡Vamos juntos!-

-Pero no me falta nada.copy right hot novel pub