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El Secreto de Ismael

Capítulo 32: Nadie puede arrebatarlo

Diana miró a Ismael como si estuviera mirando un idiota y hizo una mueca y bufó con una risita: -Ja, Ismael, ¿qué quieres decir con eso? ¿Qué pasa? ¿Eres ese misterioso adinerado Señor Briol?-.

Ismael negó con la cabeza y soltó una risa: -A lo mejor sí-.

Sonó carcajadas.

De pronto, en el salón de la casa de Villarroel se inundó de risotadas y carcajadas.

-¡Joder! Ese Ismael está loco, ¿cómo ha podido decir eso?-.

-¡Qué sin vergüenza! ¡Será que la idea de lucirse le ha llevado a la locura!-.

-Mira que Helena ha tenido la desgracia de su vida por tener a ese hombre como marido-.

Frente a la multitud que se partía del culo, Ismael mostraba indiferencia.

Ese grupo de insignificantes no sabían que el que estaban delante de ellos era el adinerado Señor Briol que tanto envidiaban y admiraban.

De repente pasó algo.

La nuera Julieta se puso de pie, con el dedo señaló a Ismael y le regañó: -¡Ismael! ¡Hazme el favor de cerrar el pico! ¿Crees que tienes el turno de palabra aquí? ¿No sientes vergüenza? ¡Yo ya siento suficiente humillación por ti!-.

¡Julieta estaba a punto de explotarse de rabia!

Ese Ismael le hacía pasar por vergüenza en todos los sitios.

Y se preguntaba si él tenía siquiera sensación de vergüenza.

¿O es que de verdad quería que la gente les menospreciara para sentirse mejor?

Inútil le llamaba en su cabeza.

Y cuando regresen este noche, planean hacer una escena para que se divorcie Helena de Ismael.

Malena que estaba a su lado también se unió a mofarse: -Ja, ja. Un tipo que vive de su mujer encima tiene el valor de decir algo tan arrogante, veo que no sabe bien dónde está su lugar-.

Ismael quería dar explicación, pero Helena que estaba a su lado con cara seria directamente le dijo en voz baja: -¡Ya basta, Ismael! ¡No digas más!-.

Los ojos de Helena estaban llenos de lágrimas por agravio, ya de por sí se sentía muy mal, ahora encima Ismael había tenido que decir tales palabras que no hacían más que ponerla en medio del público y que esperar a que la humillen.

Ismael se quedó inmóvil por un segundo, tenía la frase en la punta de la lengua, pero no tuvo más remedio que inclinar la cabeza y dijo: -Lo siento-.

Señor Villarroel en ese momento dio golpes en la mesa y dijo: -Está bien, dejar las tonterías todos-.

Todos se quedaron en silencio, no obstante, miraban con desprecio a Ismael y Helena.

Era entonces que Señor Villarroel tosió dos veces, y abrió la boca: -Mira, voy a aprovechar la cena familiar de esta noche para anunciar algo-.

Después de escuchar eso, las audiencias se animó de nuevo.

Naturalmente Issac no podía contener su sonrisa en la cara, estaba muy emocionado, mirando a Helena con ojos desafiantes.

-En cuanto a la colaboración con el Grupo Guerroza, lo he pensado y finalmente lo dejaré en manos de Issac-dijo Señor Villarroel. - Helena, mañana ve a traspasar ese trabajo a Issac. De todas maneras, el contrato aún no está firmado, deja que firme Issac. Y te encargarás de echarle una mano cuando no tengas nada que hacer, y acuérdate de observar y aprender de él, ¿de acuerdo?-.copy right hot novel pub

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