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Esposa De Mentiras " El Secreto De Daniel"

El amigo metiche.

Cuando llegue hasta la habitación Sarah ya se habia cambiado de ropa, ahora llevaba un short y una blusa transparente color blanco que dejaba ver su ropa interior de encaje blanco ajustado a su pechos, decir que soy un caballero en estos momentos seria mentir, ya que ya había imaginado las muchas formas de quitarle toda la ropa vestía, me pregunto porque cuando esperamos a las mujeres se no visten rápidamente y cuando nadie las esperan se visten en un dos por tres tal pareciera magia, nos hacen esperar a propósito me pregunto, y si es así cual es su objetivo, hacernos practicar la paciencia?

Me acerque a ella dispuesto hacerla mía por el resto del día, ya estaba preparado, así que la abrace aun estando de espalda, la giré y la bese, expresando mi amor y deseo por ella, ese deseo que solo ella despierta en mi y nunca parece agotarse sintiendo que sin ella moriría lento y dolorosamente en soledad, la recoste en la cama quedando sobre ella, puse mis labios a trabajar, sabia que ella tampoco se puede negar, así que dejando espacio para mis besos en su cuello giro la cabeza, comencé a desabotonar su blusa pero era algo teniodoso que preferí tomar el camino mas rapido y le rompí la blusa, aun sabiendo que tal vez se moleste o asuste por la sorpresa, pero su mirada no motro ningun signo de sorpresa o desagrado, por lo que hice lo mismo con mi camisa escuchando caer los botones al suelo haciendo un ligero pero audible sonido, me desabotoné el pantalón quitandolo quedando solo en ropa interior, y regresé sobre ella besando sus labios, pero cuando lleve mis manos al botón de su short me detuvo, diciendo que hoy llego su amigo andres de visita, y mi mente desorientado se preguntaba, cuantos amigos tenía esta mujer y porque ese amigo era más importante que hacer el amor con su esposo, no importa lo veremos más tarde le dije, hice un movimiento audaz haciendo que Sarah quedará encima mío, le baje la tira de su ropa y besé su hombro dejando sus excitantes pechos al aire, como un bebé hambriento metí su pezón en mi boca mientras Sarah dejaba escapar un sutil pero excitante gemido, también disfrutaba de mi acción, arqueo la espalda dándome mejor acceso completo a sus bellos y tan deliciosos pechos, definitivamente me sentiré celoso que un bebé los tuviera la mayor parte del día en su boca y si no importa que sea el mejor alimento para su desarrollo, sin duda que si tenemos un hijo no se alimentará del cuerpo mi mujer.

Sin saber que mi mente estaba en una guerra entre la logica y sobre un bebé que ni siquiera aun existe.

Cuando la voz de Sarah me saco de mi letargo pensamiento, estaba molesta y no sabía porque, no puede evitar preguntarme que hice.

- Ya, para... Hoy no podmos hacerlo.

- Porque cariño, te mordí muy fuerte?

- No, no es eso, pero no estoy disponible ahora.

- Cariño no te preocupes, deja que yo hago todo, tu solo goza, me encanta darte todo el placer posible.

- Daniel, andres llego hoy...

- No importa que espere, lo buscaremos más tarde y nos disculpamos dije, aun besando su cuello.

- Daniel de verdad no entiendes, verdad, le dije, mientras moría por reírme de su inocencia, que no que había tenido muchas mujeres y nunca a oído ese sobrenombre, me pregunte.

- Ni importa quien es, yo tengo que ser lo mas importante para ti oíste, dije chupando su cuello dejando una marca muy visible..

- Cariño, dije de forma melosa, me llegó el período, ni había terminado todas mis palabras y Daniel ya había dejado de besarme, me bajo y recostó en la cama con cuidado, pregunto si me duele, y porque no le dije antes, metió su mano en mi ropa colocando su mano en mi vientre bajo, mientras hacía que me acomodará en su brazo, duerme un poco, si necesitas algo, dímelo y lo conseguiré.

Fue todo lo contrario que me imagine que haría, pensé que estaría molestó ya que su dulce producto esta más que endurecido por la excitación, como niña inocente pregunté mirando que producto golpeando mi cuerpo que harás con eso, de manera inconsciente y ruborizandose me pidió que me callara, voy al baño, espérame aquí y luego bajamos, dijo, mientras se dirigía al baño me levante de la cama y le dije que lo esperaría con los demas, pero antes de que Daniel entrara al baño lo llame y le dije que lo disfrutará moviendo mi mano de arriba hacía abajo.

- SARAH!!!! grité.

Quien diría que con esa carita de inocencia y palabras inocentes esta mujer se burlara así de mí, no creía que sería tan audaz en decirme que lo disfrutara haciendo con su mano el movimiento que hacemos los hombres cuando nos masturbamos, que claro no estaba nada equivocada de lo que haría en el baño, me preguntaba cuando se volvió atrevida, no cabía en mi mente a esta nueva Sarah, nueva o tan solo no la conozco bien. Jajajaajaja.copy right hot novel pub

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