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Esposa De Mentiras " El Secreto De Daniel"

una sonrisa al espejo

Qye valor tienes, ese solo lo puedes poner solo tú, el valor no es de quien lo proporcione, porque para esa persona puedes ser un diamante o simplemente un pedazo de carbón, como se dice, todo depende de los ojos con los cuales te vean, porque del mismo carbón puede sacar el diamante mas duro con la claridad de una mirada sincera y sin ningún imperfección, tan grande como un corazón o tan pequeña como una semilla, sin importar cual sea tu precio otorgado por los demás, el precio dependerá de cuanto te amas y te valoras como mujer, tus principios, tus creencias, tus ideas, tu cuerpo, tu corazón y tu alma deberán tener el mismo precio y belleza que el exterior, eso es lo que realmente vale, o que piensan ustedes señores, es tan importante la imagen exterior que el interior?

- Claro Sarah, como siempre tienes razón, tus padres te criaron bien, sin duda no solo eres bella también tienes la inteligencia que a muchas le hace falta.

Como pude tener un hijo tan pendejo que dejo a una mujer como Sarah, eres un estupido Isaí, avergüenzas a los Roberts.

- Claro señor Roberts, mi esposa es más que una carita bonita, es mucho más inteligente que usted y yo juntos.

- Hola Sarah, podemos platicar en privado?

- Claro Demián, no hay problema, ahora vuelto amor.

- Claro cariño, no problema, cuídate.

Miré irse a mi amada esposa, ese hombre esta enamorado de mi mujer, pero ahora dejo claro mi lugar y el suyo, estoy muy contento.

- mhmhm, Señor Williams, no debe estar tranquilo que él se lleve a su esposa, antes estuvieron muy enamorados.

- Confío en mi mujer, señor Roberts, gracias por su preocupación pero no es para tanto.

- Se debe procurar se dice que donde hubo fuego cenizas quedan.

- Habla a su favor señor Roberts?

- Tal vez así sea, no se, hay que preguntarle a Sarah.

- No hay necesidad, ya que ni siquiera habla de ti, así que por ti no me preocupo, y ése tampoco es lo suficiente como para quitarme a mi mujer, apesar que de él si me hablo, pero ahora el amor de Sarah soy yo, y solo hay lugar para mi en su corazón.

Y un consejo tenga un poco de respeto a su esposa que esta sentada a su lado, que me disculpe iré a hablar con unas personas.

- Hola Demián, estoy contenta de verte de nuevo, que cuentas, dime como has estado?

- He estado bien, terminé mis estudios, y ahora mi familia esta mejor, pero parece que llegué tarde de nuevo a tu vida.

Él fue antes a tu fiesta y te besó primero, después de años, te encuentras con él y te entregas a él, y no solo eso le das una hija, realmente lo envidio, tiene todo lo que deseo, pero de corazón te deseo lo mejor, así que sigamos con nuestra amistad, sino puedo ser el hombre que esté a tu lado, seré tu hermano, dicho esto, olvidemos que una vez intentamos ser algo más que amigos.

- Sabía que todas sus palabras le duele, pero no hay lugar para nadie más en mi corazón que Daniel.

Dicho eso lo abrace y el me dio un beso en la frente, pero inmediatamente me alejo de él, con la explicación que no quiere que se malinterprete nuestra cercanía, cosa que le agradezco, nunca he visto celoso a Daniel y tampoco quiero verlo.

Después de todo, volvimos a nuestra mesa, me la pase platicando con Demián y Daniel, quiero ue sean amigos y estén bien en una relación buena.

La fiesta termino y nos fuimos a la casa, pero todo el camino fue silencioso, era algo incómodo pero nadie hablo.

Apenas llegamos y estacionó el auto, salió corriendo para abrir la puerta para que bajará, pero no esperé sus movimientos audaces para someterme a sus brazos con un beso posesivo, cosa que extrañe, a pesar que en la tarde me beso y jugó con mi lengua, sus manos hábiles viajaban por mi espalda hasta llegar a mi trasero, levantandome, le rodee la cadera con mi piernas y su cuello con mis brazos.

Camino llevándome en sus brazos hasta nuestro dormitorio, cuando entramos a la habitación me apoyo contra la pared y sus labios, me bajo y deslizó las tiras finas del vestido y esté cayó al suelo, dejándome solo en tanga, beso mi cuello y me alzo de nuevo, dejando mis pechos a la altura de su boca, con movimientos ágil de su lengua sobre mis pechos su glorioso, haciéndome gemir de placer, en mi casa había una pelea, dejarme llevar a la placentera perdición del placer o para por el periodo, cuando aun no había decidido, se dirigió al baño, cuando llegamos me dejo sentada sobre el lavamanos, bueno no se que idea tiene, pero ya no me puedo negar a no hacerlo, lo deseo mucho y no puedo aguantar más, le ayudé a quitarse la ropa, aun con los zapatos de tacón alto, bajé del lavamos, y desabotoné su pantalón, bajé sus pantalones con todo y su boxer, dejándome sorprendida por su producto, es un hecho que ya lo he sentido pero nunca lo había visto tan cerca, mientras que Daniel me miraba con esa sonrisa pícara en su rostro, descalzo y desnudo se veía tal cual me imagine que era, estoy dispuesta a todo con él, así que con temor tome su producto en mis manos, era tan grande que mis manos, me acerqué poco a poco mi boca, al principio se alejo pero al final de se dejo, "cariño no lo hagas por favor" me dijo, estaba a sus pies por lo que no hice caso a sus palabras, dime si te gusta dije antes de comermelo, lo introduje todo en mi boca de un solo movimiento, " menos dientes" " no olvides respirar por la nariz" dijo solo para luego dejar un pequeño grunido, "lento" "deja que te ayude" dijo y colocó sus manos en mi cabeza, indicando y tomando el control de la rapidez de los movimientos de mi cabeza.

Después de no se cuanto tiempo me levanto, pero ya mi boca me estaba comenzando a doler, me levanto y me puso frente al espejo, bajo la braga y lo tiro al bote de basura, estoy segura que vio la toalla absorbente con sangre, y yo estaba tan avergonzada que me miro en el espejo detrás de mi espalda besando el lóbulo de mi oreja, dijo "tranquila, es tu sangre y nada de ti me da asco" le sonreí al espejo, mientras el jugaba con mis pechos y también miraba el espejo, "me gusta verte disfrutar" susurró, mientras entraba lento en mi producto desde atrás, gemí hasta quedar ronca, luego me sentó de nuevo en el lavamanos y siguió con sus perfectos movimientos, me hizo correrme varias veces, fue tan intenso que llegar al cielo había sentido tan fácil, terminó dejando la semilla de producto dentro de mí, fue la segunda vez a no ha utilizado condón, me sentó de manera segura en el lavamanos y fue a graduar la temperatura del agua, nos bañamos juntos, fue la primera vez desde que nos casamos, luego que terminó de bañarse salió y me trajo la pijama, ropa interior y toallas absorbentes, dormí como un bebé en sus brazos, " te amo" escuche decir antes de perderme en el mundo de los sueños.copy right hot novel pub

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