Modo oscuro
Idioma arrow_icon

Esposa falsa de Simón

Capítulo 80: ¿Quieres probar?

El rojo brillante picó los ojos de Simón de una vez y sus manos soltaron a Frida inconscientemente, pero frunció el ceño profundamente, -Joder,¿Qué emoción estás descargando?-

Frida ignoró la sangre roja en sus manos y su cuerpo se encogió en la esquina.

Ella se abrazó a sí misma, con odio en la mirada.

Simón entrecerró los ojos-¿Me odias?-

Frida no habló, pero su mirada estaba llena de odio hacia Simón.

-¿Me culpas por lo que pasó ayer?-Simón esbozó una fría sonrisa, pero inconscientemente miró el lugar sangrante en su muñeca, su voz gradualmente fría -No serás subyugada ni explicado, te mantuve encerrada por un día, ¿Hay alguna pregunta?-

Frida se mordió el labio inferior, sin dejar de mirarlo con fiereza.

Simón se sintió impotente, solo pudo decir, -Venga aquí.-

Pero Frida no se movió.

Las venas azules de la frente de Simón se abultaron y tuvo una rabia oculta entre sus cejas, su voz es fría, -Mi paciencia es limitada, venga ya, o quieres hacerme enojar?-

Había una atmósfera pesada en la sala del hospital, las manos de Frida seguían sangrando, pero se quedó allí sentada y se negó a avanzar, mirando a Simón enojada con hermosos ojos.

Rafael se quedó atrás y observó esta escena, sintiéndose extremadamente conmocionado.

Frida ... ¿Qué diablos le pasó? ¡Anoche, Simón la sacó él mismo de la villa!

-¡Joder!-Simón maldijo en voz baja y alcanzó a Frida con su gran mano.

Frida quería evitar su toque, pero él agarró su delgado brazo de una vez, luego se le oyó apretar los dientes y decir, -Ve a llamar al doctor.-

Rafael se congeló por un segundo y luego asintió.

Después de que llegó el médico, vendó la mano de Frida y suspiró- Es bueno estar despierta, pero esta señora está demasiado débil, es mejor no moverse.-

-Ya lo veo, gracias, doctor.-Rafael agradeció al médico mientras lo enviaba.

Frida no estuvo dispuesta a cooperar durante todo el proceso, pero su fuerza no pudo romper con las limitaciones de Simón, fue extraño que él, un hombre en silla de ruedas, ¿Cómo tenga tanta fuerza?

-Simón, déjame ir... .-Frida fue muy furiosa y trató de soltarse de su mano, pero la mano de Simón se cerró con fuerza contra la de ella como una cadena de hierro.

Sus ojos fueron oscuros y aterradores.

-Es mejor que estés callado, o de lo contrario... te tiré abajo desde aquí.-

Al escuchar esto, Frida se detuvo.

La fina boca de Simón se movió levemente y agregó una palabra-Este es el sexto piso.-

Frida dijo, -Simón... eres un imbécil.copy right hot novel pub

Comentar / Informar problema del sitio