-¿Qué quieren?- Frida solo quería irse, pero ellos la detenían.
-No, no me toquen, déjenme-.
Sin embargo, antes de que Frida pudiera reaccionar, uno de ellos se abalanzó, la cargó y salió corriendo, y los demás rápidamente lo siguieron.
Todos en el lugar se quedaron estupefactos, no entendían que acababa de suceder.
-Simón, hay noticias del hospital-.
A Rafael no le importó lo que pasaba en la sala de juntas, el ingresó y empezó a hablar. Simón estaba atendiendo a un cliente importante, se sorprendió porque Rafael lo interrumpió.
-¿Hay noticias?-
Rafael dio una mirada a la otra persona, y asintió con la cabeza.
Inmediatamente, Simón dijo fríamente -Doctor Patricio, me disculpo por hoy, pero acaba de surgir un asunto muy importante, me encargare que alguien más lo reciba.
Cuando terminó de hablar, no le importó si esa persona estaba de acuerdo, Rafael empujó la silla de ruedas donde estaba sentado Simón para irse.
En el auto, Simón frunció el ceño, - ¿Cuál es la situación? -
-¿Simón no me permite atender las noticias del hospital? Justo ahora mis subordinados me informaron de una mujer que vestía de manera extraña, llevaba un sombrero y una mascarilla, a plena luz del día de manera sospechosa acudió al área de obstetricia y ginecología, y no iba acompañada. -
Al escuchar esto Simón entrecerró los ojos tenía una mirada peligrosa.
-¡Tenía que ser ella!-
-Esa persona ya fue capturada, y está en la Villa Westlong-.
-¿Que quiere hacer? ¡Déjenme ir!- Frida había sido cargada en hombros todo el camino, estaba mareada, y quería vomitar.
Afortunadamente, después de subir al coche, no pasó mucho tiempo antes de llegar a su destino, Frida había sido cargada, no sabía cuánto tiempo fue sacudida, al final fue puesta nuevamente en el suelo.
-Esto es un secuestro, les diré, que no tengo nada, y tampoco deberían molestar a mi señor…-
Al decir esto, volteo a ver a la persona que estaba frente a ella y se detuvo abruptamente.
Frida veía a la persona que tenía enfrente con incredulidad.
-¿Simón?-
-¿Cómo llegó hasta aquí?
Parado detrás de él se encontraba Rafael, viéndola de manera inexpresiva, la mirada de Simón era tan oscura como la noche, su cuerpo expedía una sensación fría.
Solo miraba.copy right hot novel pub