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La primera vez que noté algo extraño en mi Esposa fue aquella mañana, cuando desperté después de haber pasado la noche con ella porque era "mi obligación por ser el Duque", aunque ése solo era un título falso y sin valor alguno, como mi vida misma...

Los ojos de mi Esposa ésa mañana eran distintos, no me miraban como si miracen a un perro.. una mascota, sino que reflejaban preocupación, era extraño que ésa mujer que siempre fue malvada y fría de repente sintiera simpatía hacia mí, creí que solo fue mi imaginación así que no le presté mucha atención.

Pero a partir de ésa noche la actitud y la personalidad de mi Esposa cambiaron drásticamente, sus expresiones y la manera de hablar.. todo era distinto, sonreía amablemente y me hablaba con dulzura, tanto que me hacía ruborizar... trataba de calmarme, era obvio que solo estaba jugando conmigo.. era otro de sus extraños juegos, si.. no debía tener esperanzas

Los días pasaron y ella siguió siendo amable, ahora me llamaba "Lean" y no

"Mi juguete" como lo hacía antes, incluso planeó un viaje a la Capital.. ella jamás había dejado que la acompañara a ningún evento social, porque se avergonzaba de mi por ser mitad plebeyo.

Viajamos a la Capital, era mi primera vez en una ciudad tan grande estaba muy emocionado, todo parecía ir bien hasta que un día después de que ella fuera al Palacio para reunirse con la Reina, un chico apareció de repente en nuestra Mansión

De cabellos rosas y ojos color amatistas, sin lugar a duda era el primer hijo de la Reina, el Príncipe Christopher Lizerón.. Fueron tantas las veces que escuché a mi Esposa maldecir a éste niño que no podría llegar a una idea fija de cuánto lo odiaba, a él y a toda la familia Real.

Porqué el Príncipe había venido a nuestra Mansión? Estaba preocupado de cómo reaccionaría mi Esposa, pero para mi sorpresa ella fue muy amable con él e incluso le permitió quedarse en la Mansión, estaba más que sorprendido.. la Duquesa de Albridge que conozco estaría maldiciendo entre uñas y dientes solo por tener que interactuar con él, pero ahora estaba felíz porque el niño se quedaría con nosotros, algo no cuadraba.

Con firme los días pasaban mis dudas fueron creciendo, comencé a sospechar que quién estaba en el cuerpo de mi Esposa no era ella.. pero no tenía idea de quién se tratara, no lo sabía.. hasta que escuché por accidente al Príncipe llamarla "Madre"

Si se trataba de su Madre entonces se refería a la Reina Rosemary Lilian de Serent, la persona que más odiaba Giselle en el mundo... era ella quien ahora estaba ocupando su cuerpo? Pero cómo era posible?

Seguí diciéndome que era algo imposible y a fingir que no lo sabía, porque aunque fuera cierto nada cambiaría para mí... fuera la Reina o fuese Giselle, seguiría siendo una existencia innecesaria para ambas

Para Giselle solo era una mascota, un objeto que compró por una gran suma de dinero.. para la Reina solo era el Esposo de la mujer que ahora se encuentra poseyendo, debe fingir que me ama para evitar ser descubierta.. no importa quién sea yo nunca seré amado.

Conforme los días iban pasando más seguro estaba de que mi Esposa era la Reina, el Príncipe Christopher y el Duque Darion venían a la Mansión para hablar con ella, estaban planeando algo en contra de la "supuesta Reina" que ahora se encontraba en su cuerpo.

Me escondía detrás de la puerta como una rata para oír sus conversaciones, yo también quería ser incluido.. quería decirle que no me importaba que fuera otra persona.. no me importaba si no me amaba, solo quería apoyarla y permanecer a su lado... aunque dije que me daba igual, no logré evitar ser cautivado por ella.. era la primera vez que recibía el amor y la gentileza de alguien a parte de mi Madre, me sentía muy felíz cuando ella me llamaba "Lean" e incluso aquella vez que se enfrentó a mi Padre y se enfadó por mi, sentí que le importaba.. quería estar con ella para siempre

Escuché al Duque Darion llamarla "Esposa"... apreté los puños furioso, estaba celoso y sentía mucha envidia, él era su esposo legítimo y yo no era nadie para ella, incluso ni siquiera podía llamarla por su nombre "Rose"... en las noches me sentaba sobre mi cama y practicaba en secreto decir su nombre "Rose.. rose.. Rosemary.." sabía que jamás podría llamarla por su verdadero nombre, me sentía patético.. un perdedor.

Me comporte como un niño y actúe infantílmente.. reclamándole atención por su parte, quería que me mirara al igual que miraba al Duque Darion o al Conde Joseph.. quería ser su verdadero Esposo, me sentía como un ladrón.. robándole a ambos el tiempo de su Esposa, pero no me importaba.. la quería para mí, quería que fuera mía, me sentí avergonzado de mi mismo por pensar de una manera tan egoísta.

Otros días pasaron y yo aún no podía enfrentarla, no podía decirle que sabía su secreto por miedo a que me abandonara, estaba asustado de volver a estar solo.

Ella vino a mi habitación una noche y me dijo que teníamos que regresar al Norte, estaba muy exaltada y nerviosa.. no pregunté nada y la seguí hasta el carruaje, el chofer nos llevó hasta un camino a las afueras de la Capital en dónde nos estacionados por varias horas, ella seguía muy nerviosa y preocupada, no sabía que estábamos esperando hasta que Raphael llegó junto con el Príncipe Christopher.

Ambos parecían estar en problemas ya que no se dieron cuenta que se llamaron el uno al otro "Madre e Hijo" estando yo presente, fingí no escucharlo.

Ambos bajaron del carruaje y se apartaron hacia un lugar alejado, adentrándose al oscuro bosque.. suponía que tenían asuntos familiares de los que hablar y no querían hacerlo frente a un extraño como yo, me sentía excluido y triste.. no entendía porqué, ya que no era nadie para ella..

Momentos después escuché un grito desgarrador, ella estaba llorando.. me apresure en bajar del carro para ir a buscarla pero Raphael me detuvo, me dijo que esperara y que él iría a ver.

Aunque no quería obedecer sabía que aunque fuera no ayudaría en nada, aún así quería estar con ella.. estaba tan preocupado que iba a morir, pero me tragué mis instintos y me mantuve en silencio.

Pocos momentos después el Duque Darion salió de entre los arbustos cargando a Rose en sus hombros, antes de que pudiera acercarse más una flecha salió de entre los árboles y le dio en la pierna izquierda, haciéndole caer al suelo..

Raphael y sus hombres corrieron para ayudarlo, Darion le entregó a Rose junto a una Daga que después Raphael dejó en el carruaje cuando trajo a Rose, su rostro estaba pálido y sus ojos vacíos.. parecía un cadáver.

Raphael me encargó que cuidara de ella y el carruaje se movió sin darme tiempo a reaccionar, nos alejamos del lugar rápidamente

Ella seguía sin reaccionar, no sabía que había ocurrido pero por la sangre y porque Christopher no había regresado con ellos, me hice una idea

No sabía qué decir para animarla, solo logré enfadarla y hacerla pasar por otro mal momento, al final no podía hacer nada.. nada.. era un inútil.

Miré hacia la Daga que estaba sobre el asiento del carruaje, tanto el mango y la hoja eran de un color negro.. en el mango había un Rubí y al rededor unos dibujos tallados, era el escudo de la familia Albridge..

Ésa era la Daga de la que tanto me habló Giselle, ella dijo que era capas de conceder un deseo pero el costo era muy grande.. se debía sacrificar la vida de una persona muy preciada y después la propia vida, pero la misma persona no podía usarla dos veces y los deseos no eran ilimitados sino que solo podían pedirse hasta que el Rubí en el mango se rompiera, cuando éso pasara la Daga desaparecería para siempre y solo aquéllos cuyas vidas fueron usadas durante el "ritual" conservarían sus recuerdos.

Algunos de éstos datos no se les fueron dicho al Rey, ya que el anterior Duque quería poner a prueba la codicia de su "amigo", si después de descubrir el poder de la Daga él intentaría volver a usarla.. pero el Rey jamás la usó, porque no creía que funcionara y no estaba dispuesto a sacrificar su vida, y tampoco tenía a alguien preciado al cuál dar de ofrenda.

Lo que no entendía era como una persona que haya usado la Daga y pedido su deseo después de suicidarse, pudiera volver a pedir otro... a no ser que regresara en el tiempo o pidiera convertirse en alguien más...

Fue entonces que me di cuenta de cómo fue que Rose había terminado en el cuerpo de Giselle, pero porqué ella quisiera ser Giselle siendo la Reina? Seguía sin entender muchas cosas.. pero había algo que estaba claro y era que con la Daga podría arreglar las cosas, podía hacer que todo volviera a la "normalidad"

Y éso incluía mi vida antes de conocer a Rose...

Volvería a ése infierno y regresaría a ser la mascota juguete de la Duquesa Albridge, de solo pensarlo mis manos temblaban.. no quería volver a ésa vida oscura y solitaria, quería permanecer con ella.

Pero no quería verla sufriendo y llorando, viviendo una vida que no era la suya.. no podía ser alguien tan egoísta, yo de verdad la amaba... la amaba con todo mi ser y pensar en hacerle daño me hacía helar la sangre, no quería lastimarla..copy right hot novel pub