Vanesa no capturó la mirada inquieta, así que lo miró diciendo,

—Me extraña que su padre me conozca, porque pocas veces salí de casa, ni hablar de presentarme en las actividades comerciales.

Después de un respiro silencioso, Santiago dijo,

—¿Ya fuiste a su casa?

Vanesa asintió y le contó hasta la ubicación de su casa,

—Es una villa grande, y está ubicada en el centro de la ciudad. Supongo que son ricos.

Apenas se enteró de la ubicación, Santiago ya supo de quién era. Bajó las miradas para ordenar los documentos,

—Debe ser la familia Covarrubis.

Vanesa le contestó precipitada,

—Sí, sí, es su apellido. ¿Lo conoces?

Santiago asintió,

—Me encontré una vez con el señor Covarrubis en un evento comercial. No lo conozco mucho ni tampoco tenemos los contactos comerciales. Dicen que se dedica su familia a las inversiones y consiguió mucho éxito, pero…

Detuvo de repente, y la miró con los ojos llenos de seriedad,

—Por la amistad, te aconsejo que se mantengas alejados.

Vanesa preguntó curiosa,

—¿Por qué?

Santiago no la contestó más.

Vanesa se quedó de repente descontenta murmurando,

—Que se mantengo alejados a Gustavo y a la familia Covarrubis, pero nunca me darás la razón. ¿Qué quieres?

Apenas la contestó Santiago, Adam dijo precipitado,

—¿No te das cuenta de que está celoso el jefe?

De pronto Santiago y Vanesa lo miraron juntos a Adam sin expresión.

La sonrisa desapareció poco a poco del rostro de Adam y éste murmuró cabizbajo,

—Una broma, no seáis tan serios.

Luego se volvió todo silencioso, y Vanesa volvió a leer las noticias por Internet.

«¿Hasta cuándo podrán publicar lo que dije recién? Creo que ya les expliqué con mucha claridad».

Cuando Santiago trabajaba, le llegó un mensaje, y era de Lidia.copy right hot novel pub