¡Abran paso!
- ¡La sultana del reino de oriente!
- Escuche que es muy poderosa
- Escuche que es una mujer
- ¿¡Una mujer en el poder!?
- ¿¡Estaran locos!?
Los murmullos que llenaban las calles de Barcelones hablaban exclusivamente del enorme barco que acababa de llegar al puerto. Era enorme en verdad, mas grande que alguno de sus barcos de guerra pero se notaba que era de la realeza por las decoraciones y chapados en oro. Ademas del símbolo de la realeza otomana hecho en oro grabado en el casco de la nave. Todos los ciudadanos estaban ahí hablando entre susurros, murmurando y chismeando mientras que un carruaje real llegaba al lugar
El Rey Fernando se preparó y suspiro. Sabia que su antiguo y poderoso rival, Constantino IX habia muerto a manos de aquella mujer que bajaria del barco en unos minutos. Habia envidiado a Constantino por años, viendolo invencible conquistando tierras por doquier, sin ningun rasguño viendose imbatible e invencible. Si hubo alguien que pareciera un Hércules real, era Constantino el invencible
Pero resulto no ser tan invencible
El dia que llego aquella carta nunca la olvidara. Un espia que tenía en aquella ciudad llego corriendo al palacio y entrego la carta, una carta llena de manchones por las prisas para escribirla pero era bastante clara. Constantino habia muerto, y a manos de una mujer
Se río, penso que era una broma ¿Como una debil mujer ganaria sobre el hombre que era el Hércules de este tiempo? Pero no fue hasta que el nombre de Jesin el-Fātiḥ sono en sus oidos que se asustó. La hija mayor de Murad II la mas inteligente, la mas habilidoso, la mas destacada entre sus hermanos desde hace unas semanas, coronada la primera sultana del Imperio Otomano a pesar de ser una mujer y que tenia 3 hermanos varones que también podian tomar el trono. Pero la habian escogido a Ella, por alguna razon ella tambien era considerada varón a ojos de la ley otomana, aunque no sabia el porque
Ella habia derrotado a Constantino con honor. Una lucha de espadas que la sultana ganó de buena fe segun su espía. Sin trampas ni puñaladas en la espalda, algo anormal entre los otomanos que siempre se estaban envenenando entre ellos. Constantino perdio luchando con su espada y murio de pie, en posicion de pelea, luchando hasta el ultimo segundo, murio con honor y su cuerpo fue enterrado segun las tradiciones romanas y con los honores de un emperador, al igual que los soldados, enterrado en medio de festejos de honores militares
No lo entendía, hasta que le dijeron que esa fue la última peticion de Constantino, que su gente no callera en la deshonra y cumpliendo su palabra la Sultana Jesin los enterro con los maximos honores. Eso lo motivo a intentar hacer una alianza, la sultana tenia honor, era leal y por sobre todas las cosas, tenia el respeto y lealtad máxima de su pueblo y de su ejército
No debia confiarse con que fuera una mujer seria débil. Ella era mas poderosa que él y lo sabía. Pero era un Rey y antes de darle el trono a su nieto, le arreglaria unas ultimas cosas para que no tuviera alguna guerra accidental con la regente de oriente. Además, por mera casualidad se habia enterado que la segunda esposa de la sultana era de hecho de nacionalidad española. Quizá no influenciaria mucho pero tal vez por la nacionalidad de su esposa acepto el trato y el matrimonio
- ¿Esta bien majestad?- Pregunto Felipe, el virrey de Barcelona y uno de sus mejores amigos de todo el mundo. Su hijo mayor y su abuelo iban con él, hombres de confianza para su familia que lo ayudarían a manejar a la poderosa regente de Oriente.copy right hot novel pub