Mera se arreglaba el vestido con mucho cuidado, era de un color azul oscuro con detalles de hilos de oro, su vestido era largo y tapaba sus piernas, era voluminoso en la zona de abajo pero apretado en su cintura y pechos. En momentos como esos agradecia que sus senos hayan crecido por amamantar a Nasra y no haber engordado gracias a la dieta que le dieron las matronas

- Se ve preciosa Alteza- Dijo una de sus sirvientas, por suerte pudo traerse a las sirvientas de su casa de Edirne. Esas mujeres la habian criado junto con su madre y eran en quienes mas confiaba. Difícilmente confiaria en las sirvientas del palacio

Las sirvientas eran escogidas por las mucamas de mayor edad que dirigian el palacio. Comúnmente era Aldora quien se encargaba de mantener el palacio en pie, era la lider de las sirvientas y la autoridad entre todas. Pero sin ella la responsabilidad habia caido en las mucamas de mayor edad que ayudaban a Aldora y por eso tantas sirvientas con ganas de acostarse con Jesin habían entrado

Aldora se habia encargado de mantener las zorras afuera, ahora que ya no estaba las zorras aprovechaban

- Gracias Meriz- Sonrio Mera a su sirvienta y se vio al espejo arregladose la corona de Sultanita que Jesin le habia regalado dias despues de su boda que representaba su realeza

A su lado Daniela se estaba arreglando nerviosamente, su vestido a diferencia que el de Mera era de un color rojo pasión muy español, bastante mas pegado al cuerpo aunque dandole cierta libertad de movimiento. Se acariciaba la corona que usaba en su cabeza, a diferencia de Mera que usaba Sultanita, las joyas preciosas de los Sultanes, ella usaba rubíes rojos iguales a los que usaba Jesin

- ¿Estas bien Daniela?- Murmuro Mera viendo como Daniela parecia nerviosa mordiendose el labio

- Si, es sólo que no me gusta los bailes- Dijo ella en voz baja observando su reflejo en el espejo- Me trae recuerdos de España

- Si quieres puedes quedarte con Badir y Nasra, estoy segura que Jesin entenderá- Dijo Mera de inmediato, lo que menos queria era que Daniela recordara España teniendo en cuenta los horribles momentos que paso ahí

- Se que lo entenderá, pero tambien sé que es un evento importabte y que la mayoria de las mujeres casaderas estaran ahí. En momentos como estos extraño a Aldora, era quien mantenia a las interesadas afuera

Daniela suspiro y Mera también, con el tiempo la idea de que Aldora fuese la tercera esposa peso en sus mentes, pues aunque no deseaban que Jesin tuviese otra esposa, el saber todo lo que habia sufrido la griega hacia que cambiaran de opinión. Ahora que no estaba la extrañaban a mares, pues era unica en su trabajo

- Altezas- Un sirviente entró a la habitación despues de que una mucama le abriera la puerta- La Sultana Jesin las está esperando

- Ya vamos- Asintió Mera y vio a Daniela que miraba a Badir algo nerviosa- No te preocupes, ellos estaran bien, Duarte esta aquí

El tigre de bangala que estaba siendo usado como almohada por ambos bebes rugio de acuerdo al escuchar su nombre y los dos hijos de Jesin rieron con alegria por el rugido aunque las mucamas parecian sinceramente asustadas, Duarte tenia dos años y ya media 3 metros de largo y un metro de alto, ademas de pesar casi 180 kilos. Era grande, del tamaño ya de un tigre adulto e intimidaba bastabte a la servidumbre aunque a ojos de Jesin seguia siendo el mismo mimado de siempre

Jesin también se quejaba que se comia toda la carne, aunque al menos Duarte servia de niñera

- Si, con Duarte estaran bien- Tal vez no sepa cambair pañales, pero Duarte se aseguraba de que estuvieran a salvo, ninguna persona se atrevia a siquiera hacerles algo a los niños con un tigre adulto mirandolo fijamente

Ambas salieron de la habitacion de Daniela y observaron a Jesin que estaba parada hablando con Mehmed. Su cabello estaba suelto y en rulos, con su corona en su cabeza dorada y roja. Usaba una gabardina de color rojo burdeo con detalles en dorado con pantalones negros y zapatos igualmente negros. Abajo de la gabardina usaba un chaleco de color rojo fuerte igual al vestido de Daniela

- Que bendicion de Hera eh tenido para tener mujeres tan hermosas como esposas- Sonrio Jesin al verlas

Ambas esposas se sonrojaron ante el cumplido y más cuando Jesin se inclino y beso sus manos con delicadeza. Aun despues de casi dos años de casadas tenia aquellas muestras de cariño tan tiernas que no podian evitar sonrojarse

- Siempre tan alagadora amor mío- Sonrió Mera besando ligeramente a su esposa. Jesin sonrio y tambien beso a Daniela con cuidado evitando dañar el maquillaje que usaban ambas mujeres

- Bueno, cuando dos bellezas llegan a mi lado es imposible no presumir- Se rio Jesin enderezandose la espada que estaba atada en su cibtura con una vaina de color rojo con mucho oro y joyas. La idea era que pareciera decorativa cuando podia matar a alguien en menos de un segundo

Jesin avanzo hacia el salón real con Mera a su derecha y Daniela a la izquierda mientras que Mehmed estaba atras de ella encabezando a los visires que estaban vestidos con sus mejores ropas llenos de joyas, ademas de los respectivos guardaespaldas tanto de sus esposas como de Mehmed. Dos guardias al verlos acercarse abrieron las puertas y uno de los sirvientes bien vestido grito a todo pulmón

- ¡Entrando la gran y poderosa Sultana Jesin el-Fātiḥ Oto We Demir, la conquistadora del Imperio Romano y destructora del reino Húngaro con sus dos esposas!- Dijo el hombre mientras la Sultana y ambas mujeres entraban al salón de baile

Todos los nobles se inclinaron con respeto ante la Sultana que camino hacia la mesa alta junto con sus esposas sin mirar a nadie, su mente estaba 100 en sus esposas y rogando a los cielos que todo saliera bien hoy. No tenia ganas de conquistar otro reino por muy tentador que fuese

Los otomanos eran buenos en las guerras, eso jamás lo negaria, eran tan sedientos de sangre extranjera como ella y aunque sabia que eso era realmente malo y aterrador a ojos del resto de los reinos, ella no podia evitar emocionarse. Era algo sádica ¿Bien? No podia evitarlo estaba en su ser

Era algo violenta a veces, no podia ser un algodon de azucar cuando todos te molestan por tu orientacion sexual.copy right hot novel pub