Un par de semanas antes de que Amelia viajará en el tiempo:

Erick se levantó unos quince minutos antes que Amelia y la vio dormir "ella es un desastre" pensó, lía como él la llamaba dormía con el cabello suelto y este se enredaba en nudos bastante difíciles de deshacer durante la noche, su pijama consistía en una franelilla de tiras finas rosa con un dibujo de un cactus tomando café, unos pantis viejas y básicamente parecía estar estirada como estrella de mar en la cama mientras de la boca le salía baba.

Lía era el desastre más bonito que había visto Erick y eso lo hacía sentir mucho peor, ella era una novia excelente, su relación no era mala, muchos decían que era la pareja perfecta, pero a veces sentía que no tenía nada en común con ella y eso lo hacía sentir incómodo, pero cuando Bella se le acercó en el gimnasio para pedirle ayuda para calibrar el peso de una de las máquinas no pudo evitar sentirse atraído a ella.

Bella era enfermera de urgencias y tenía una vida ajetreada, pero aun así sacaba tiempo para mantener su cuerpo en forma y esto era algo que Erick no le gustaba de Lía, ella trabajaba, comía comida chatarra y dormía, nunca tenía tiempo para hacer ejercicio y era algo que en realidad a ella no le importaba, pero Bella era diferente le apasionaba el ejercicio y cuando pasó lo que pasó la primera vez él se sintió culpable, sin embargo, encontró la excusa perfecta y se dijo "si Lia estuviese más a la par con mis intereses esto no hubiese pasado" y se creyó esa idea por varias semanas, sin embargo, pronto comenzó a sentir el sabor amargo de la traición, Lia no tenía la culpa:

-debo terminar con ella -pensaba mientras veía como ella se giraba dormida y quedaba de espaldas a él, él se acercó más a ella para quedar en cucharita, -el problema es que no sé con cuál "ella" debía terminar.

Y era así cuando veía a Lía y ella lo veía con sus enormes y preciosos ojos grises se decía a sí mismo que debía terminar con Bella, pero cuando veía a Bella con su piel color chocolate pensaba que debía terminar con Lía y así estaba en un círculo sin fin.

Bella sabía de Lía por supuesto, pero ella decía que no le interesaba, ella una mujer ocupada que hacía largas jornadas en su trabajo y, por lo tanto, tenía una vida social casi nula, el calor que le brindaba Erick era algo que apreciaba aunque fuese “prestado” y eso hacía que Erick se volviese loco ella sabía que estaba mal y aun así lo buscaba y le escribía constantemente ¿cómo podía decir el que no a algo que se sentía tan bien? Por otra parte, aunque no lo quisiera admitir el estar con dos mujeres lo hacía sentir como si fuese una especie de dios griego, por lo mismo el sexo a escondidas le parecía aún más fantástico.

Erick sintió como su erección crecía y comenzaba chocar con los glúteos de Lía, ese parecía ser el día en que se decidía para terminar con Bella, aunque sabía que tan pronto viera a Bella pensaría en terminar con Lía.

Erick comenzó a besar la base del cuello de Lía y esta abrió un poco los ojos:

-todavía es muy temprano -se quejó ella entre dormida y despierta

-nunca es muy temprano- Erick metió la mano por debajo de la franelilla y comenzó a acariciar los pezones de Amelia, estos se pusieron duro inmediatamente, pero antes de que pudiese pasar algo más el despertador comenzó a sonar -mierda -saco la mano de donde estaba, hoy tenía una reunión importante en el trabajo y no podía llegar tarde -lo siento será para la noche -se acercó a ella y le dio un suave besó en los labios

Lía se levantó y puso a hacer el café mientras Erick usaba el baño, también le hizo un smoothie y unos huevos hervidos con aguacate y pan integral, ella no comió nada hasta que él saliese del único baño del departamento.

La Amelia del futuro, la Amelia que no había viajado en el tiempo no le gustaba desayunar antes de lavarse los dientes y aunque ella había hecho un desayuno “sano” ella prefería los huevos fritos o revuelto con bastante tocineta y un pan blanco, pero Erick insistió en que debían comer de esa manera, cuando él salió, ella entró al baño y se lavó los dientes.

Erick se puso su ropa interior, el pantalón y salió a desayunar, mientras se estuvo bañando se estaba armando de coraje para terminar con Lía, su corazón estaba acelerado y la garganta seca, tomó un trago del smoothie que ella le había preparado, a ella le quedaban espectaculares, este era de frambuesa con cambur (plátano, banana, etc.) y chía y la consistencia era como la de un yogur “si termino con ella esto es algo que sin duda voy a extrañar” se decía mientras, por otro lado, una parte de él decía “no seas estúpido un smoothie no es razón para no terminar con ella”

Lía salió del cuarto de baño y parecía conmocionada, como si estuviese a punto de llorar:

-¿Pasó algo? -Erick se preocupó y palpo inconscientemente en el mesón de la cocina para asegurarse que tenía su teléfono y que Lia no había leído nada que no debiese leer

-Mi abuelo murió -fue la respuesta de ella, y Erick inconscientemente arrugó la cara

-Lo siento… no sabía que tenías un abuelo

-Yo tampoco… -dijo ella -o sea si conocía a mi abuelo, pero hace tantos años que no sabía de él que pensé que había muerto… mis padres nunca me dijeron nada… -la voz comenzó a quebrársele, el asunto le pareció extraño a Erick, él conocía bien a sus suegros y sabía que no eran de los que ocultaban a un familiar, es decir, toda esa familia trabajaba en la misma maldita empresa

-¿Puedo ayudarte en algo?

-solo dame un abrazo -dijo ella y él la abrazo, estuvieron así un momento mientras él se preguntaba cómo haría ahora para terminar con ella -por cierto creo que hereda la mansión Wilson

-¿Qué?

-Si mi abuelo era el único dueño y parece que me la quiso dejar a mi

-oh… No sabía que era de tu familia, esa mansión es un sitio muy turístico -Erick trasladó sus pensamientos a cuando era niño y visitaba la mansión en sus salidas escolares, el sitio no estaba muy lejos tal vez a unos 10 o 20 minutos en auto y era enorme, medito un momento ¿si lía se mudara allí por alguna razón podría hacer que bella viviera en su departamento? Si era así tendría la oportunidad de tenerlas a ambas más cerca y su vida se complicaría menos, es decir, Bella vivía a casi 45 minutos en auto y los hoteles no eran baratos y siempre temía que alguien lo viera entrar en uno y se lo contaran a Lía...

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