-¡Tía!- Inesperadamente, hacer el teatro de que Jairo había sufrido de un accidente de verdad funcionó, y logró que Claudia saliera.
Sin embargo, Claudia había salido, mientras Jairo aún no se había reaccionado en absoluto.
Se deslizó hacia abajo, ¿cómo estaba?
-¡Jairo! ¿Cómo estás? ¿Dónde estás? Responde a mamá.-
Claudia se situó en la ladera y miró hacia abajo, pero estaba muy oscuro y no podía ver nada.
Estaba tan ansiosa que sudaba profusamente, y no había manera de que pudiera bajar.
Al final, Claudia incluso quería deslizarse hacia abajo igual a Jairo.
-¡Tía! ¿Quieres morirte?-
A Mauren le entró el pánico y tiró de su mano para evitar que hiciera tonterías.
-Aún no sabemos qué profundidad tiene por aquí, si es insondable ...-
-Si es insondable, mi hijo...-
Pensar en eso hizo que Claudia se pusiera aún más nerviosa.
Apartó la mano de Mauren y estuvo a punto de deslizarse hacia abajo.
No obstante, antes de que hiciera eso, se escuchó la voz de Jairo desde el fondo.
-Mamá, estoy bien, todo ha sido una broma.-
Se subió con la liana, sorprendentemente volvió sin mucho esfuerzo.
-¡Jairo! ¿Cómo estás? ¿Estás herido?-
Claudia se asustó mucho, así que lo examinó durante mucho tiempo. No pudo relajarse hasta que había asegurado del buen estado de su hijo.
Pero justo después de dio un profundo suspiro de alivio, Claudia recordó algo y su rostro cambió. De inmediato, se dio la vuelta para marcharse.
Jairo había imaginado que ella podría hacer una escapada, y la detuvo tomando su mano en el momento en que se daba la vuelta.
-¡Jairo, suéltame! No quiero volver. No me atrevo a regresar a casa. para enfrentarme a ellos.-
-Pero mamá, no regresas a casa, ¿luego también me vas a abandonar?-
-Tu abuelo, tu hermano y tu tía, todos ellos cuidarán de ti, y te tratarán bien.-
Si volviera, incluso Jairo sería afectado por su culpa.
Había cometido errores, pero no quería que Jairo fuera condenado por los demás por tener una madre tan viciosa y codiciosa.
No podía implicar a su hijo en eso, y no quería que su hijo la despreciara.
-Mamá, ¿Quieres esconderte para siempre? ¿No quieres ver a tu hijo por toda la vida?-
De ninguna manera Jairo la soltaría.
Había hierbas por todas partes, que eran más altas que una persona. Por eso, mientras se empeñara en esconderse, sería muy difícil encontrarla de nuevo.
-Mamá, vamos a casa primero. Hablaremos de ello en casa, ¿de acuerdo?-
-No, de verdad no sé cómo enfrentarse a ellos, y yo...¡tampoco quiero enfrentarme a tu abuelo!-
-Mamá, ¿todavía estás descontenta de creer que el abuelo no me trata bien?-
Jairo tiró de ella y suavizó su voz, viendo sus ojos aturdidos.
-Mamá, en realidad has malentendido al abuelo. No es verdad que el abuelo no me estime en la empresa, lo que pasa es que no quiero estar allí.-
-No hace falta que me mientas. Sé lo que ha pasado.-
Para Vicente Emiliano siempre era mejor que Jairo.
También admitió que su hijo no era tan bueno como Emiliano cuando se trataba de negocios.copy right hot novel pub