-Gracias hoy... ¡Olvidé traer mi billetera!-
Yoana se acomodó el pelo y dijo con una sonrisa.
No se negó directamente a que Diego pagara por ella, fue educada o algo así.
Ella era una chica generosa.
Especialmente, conocer a Diego hoy le dio a Yoana una pequeña sorpresa.
Debido a que estuvo en la sala de conferencias la última vez, Yoana tuvo una profunda impresión de Diego.
Solo recordó que se trataba de un estudiante que no se sorprendió y se mostró muy indiferente ante las burlas de otras personas.
-De nada...-
Diego sonrió.
-No te preocupes, al conseguir mi billetera, te devolveré el dinero. Por cierto, ¿tienes WeChat? Si tienes, te transferiré el dinero directamente...-
-¡Tengo!-
Diego no empujó, aunque esa chica que era muy hermosa, pero solo encontraron por casualidad.
Diego no tenía la costumbre de ser codicioso.
De lo común, los chicos ordinarios definitivamente dijeron que no tuviese que devolver el dinero cuando se encontraban con esta situación.
Tal vez hubiese todo lo posible para invitar a las chicas a comer, hacer amigos o algo.
Pero Diego era un poco de honesto, al menos ahora tenía ese tipo de carácter, ya que ella quería pagar el dinero, no tenía que negarla.
-¡Volveré al dormitorio, por la noche, te lo transferiré por la noche! ¡Gracias, mi nombre es Yoana Chavez!-
-¡Mi nombre es Diego!-
Diego dijo con una sonrisa.
Yoana lo despidió con sacudir la mano y se fue de prisa.
Era tan linda.
Miró la espalda de la chica.
Diego dijo en secreto en su corazón.
Oye, ¿cuándo se convirtió en un hombre que solo le gustaban las mujeres bellas?
Con una leve sonrisa, Diego se dio la vuelta y tomó el té con leche, listo para volver a su auto.
La primera vez que compró un auto tan bueno, al menos Diego no se atrevió a comprarlo en sus sueños, claro que estaba interesado.
-Vaya, mira, ¿qué tipo de auto es este?-
-Vaya, Lamborghini, esto es demasiado hermoso, este auto tiene al menos varios millones, ¿verdad?-
-Este es Reventón, uno de los autos más caros de Lamborghini, al menos tres millones de euros, este es el mejor con todos accesorios, ¡casi 4 millones! ¡Billonario, billonario en absoluto!-
Cuando Diego pasó a su lado, se sorprendió al descubrir que, en el frente de su auto ya estaba lleno de gente.
La mayoría eran chicas, también había algunos chicos.
El coche fue rodeado de personas.
La discusión era entusiasta.
Las chicas, sus ambos ojos brillaban.copy right hot novel pub