Frida se quedó toda atónita y la miró aturdida.
-Alma...-
-¿Se lastimó de quemadura?- Simón frunció el ceño y miró hacia los dedos de Frida, descubrió que sus cinco dedos blancos estaban de color carmesí en ese momento, la cara de Simón cambió repentinamente y se puso adelante para tomar su muñeca y llevó a ella hacia el baño para enjuagar con agua fría, mientras reprendía con voz fría -Ve a buscar la crema para las quemaduras.-
Alma se quedó atónita un momento y luego se apresuró a buscar la crema para quemaduras.
Frida se quedó atontada y dejando que Simón le llevara la mano y la enjuagara bajo el grifo, el frescor bañó sus dedos, el calor en ellos remitió bastante, pero mientras se enjuagaba, Frida miró el agua de aquel grifo y vio cómo se convertía en sangre roja.
Se asustó tanto que quedó horrorizada y gritó mientras intentaba retirar la mano.
Simón también se asustó por su repentino grito, pero rápidamente se calmó de nuevo y le preguntó con el ceño fruncido y voz grave -¿Te hice doler? ¿Cierro un poco el agua?-
Una voz masculina grave sonó justo al lado del oído, una presencia fría y fresca la rodeó y los sentidos de Frida volvieron lentamente y giró la cabeza para mirar a Simón que estaba muy cerca.
Sus ojos eran oscuros, Frida reaccionó extendiendo repentinamente la mano y abrazando fuertemente a Simón.
Aunque rodearla con los brazos era algo de lo que alegrarse, pero Frida parecía tan extraña hoy, daba que pensar un poco más, las grandes manos de Simón se posaron en sus hombros. -¿Qué ha pasado?-
-No, nada.- La barbilla de Frida se apoyó en su hombro y sacudió la cabeza con fuerza, -Sólo... me arden tanto las manos que me duele.-
Al oír eso, Simón frunció el ceño disgustado -Alma es demasiado descuidada, dejándote quemada así, la reemplazaré mañana mismo.-
-No, no la reemplaces.- Al oír que Simón quería sustituir a Alma, Frida se apresuró a hablar por ella -No fue culpa de ella, la sopa estaba en la mesa, me descuidé y no la mantuve firme, no fue su culpa.-
-¿De verdad?-
Frida asintió con fuerza, esta persona Alma era mucho más educada e inteligente de lo que pensaba, aunque dijo que sabía de aquel asunto, optó por defenderla cuando Simón vino hace un momento, haciendo que Simón pensara que estaba pálida porque estaba herida por quemadura.
Esta chica era tan inteligente y tan atenta, ¿no sería demasiado indigno sustituirla sin motivo?
-Bien, ya que te agrada ella entonces dejaré que se quede contigo, le daré un aumento.-
-Gracias.-
Pronto Alma trajo la crema para quemaduras y se la untó a Frida antes de irse.
Frida no se animó a decirle nada más a Simón, tenía miedo de que dijera más de lo que podía decir, así que se excusó para descansar y se metió rápidamente en la cama, Simón vio que no se encontraba bien así que no la detuvo.
Frida no tenía ganas de dormir durante toda la noche y cuando logró conciliar el sueño al final de la noche, sus sueños estaban llenos de imágenes cubiertas de sangre, mientras Sofía yacía en un charco de sangre y seguía extendiéndose la mano hacia ella, llamándola débilmente todo el tiempo.
-¡Frida, ayúdame... ayúdame! ¡Frida...copy right hot novel pub