-¿Ines Gutiérrez, qué haces?- alguien preguntó con dudas.

-Tío, ellas están heridas así, pero todavía no nos enfadan, no son de el grupo de gente anterior evidentemente. Ellas son buenas personas. -

Dicho eso, esa chica que se llamaba Ines se acercó a Xenia, -Sólo que antes de que os llevo a buscar a David, tu mano se necesita tratar. Si no te importa, puedo ayudarte. -

Naomí paró un rato, miró hacia la palma horrible de Xenia, -Está muy grave, es mejor que vayamos al hospital.-

"De lo contrario, teme que la herida empeore, y entonces será mala." Xenia pensando.

No se atrevió a decir algo esa chica Ines, sólo estaba mirando a Xenia con los ojos sinceros. Xenia pensó un poco, pero dijo riéndose con las comisuras de boca arribas, -Así que te molesto.-

Escuchando eso, la cara de Naomí cambió, -Xenia. -

Pero Xenia ya había seguido a esa chica Ines andando adelante. No había otro remedio, ella sólo podía seguirles.

Después de la marcha de ellas, un grupo de gente quedaba en el mismo sitio.

-¿Abel, cómo podías empujar a ella como querías? ¿No puedas hacerlo así en el futuro, vale? -

El chico que empujó a Xenia antes se llamaba Abel Morillo. Fue reprochado por los adultos, él levantó la boca diciendo en descontentamiento, -Ella es mala persona. -

-¡Ines dijo que ellas no eran personas malas! ¿Las habías visto que maltrataron a tu abuela de verdad? -

Abel asintió con la cabeza.

La anciana a lo mejor no quería que su nieto fuera gritado por ellos, pero tampoco quería que los demás malentendieran a las dos chicas. Por fin dio un respiro y dijo, -Ellas no me maltrataron, sólo me hablaron, a lo mejor este niño se equivocara. -

-Pues así... ¿Les hemos malentendido? ¿Ellas de verdad son las compañeras de trabajo de David? -

*

-Somos las compañeras de trabajo de David de verdad. Según lo que dijo Albina, le pasó algo en casa. Por eso venimos a ver la situación. -

Escuchó el nombre de Albina, la acción de Ines para limpiar la herida de Xenia paró una vez, y luego asintió con la cabeza diciendo, -Os creo, Albina viene aquí frecuentemente, está familiar con todos, a ella... le gusta mucho a David. Va a su casa casi todos los días. -

Dicho eso, Ines echó un vistazo a Xenia, preguntó en voz baja, -¿No te duele?-

Oído eso, Xenia quedó asusta un poco, -¿Qué pasa? -

-¿Cuando te trato la herida, no haces ningún sonido?- Inesechó un vistazo a la mano con duda, -Tu mano fue pinchada por cristales, y también por carcomas, además. hay que quitarlos con agujas. -

Xenia echó un vistazo a su palma, no dijo nada.

Naomí que estaba al lado dijo melancólicamente, -¿¿Cómo puede no doler? Siento que duele hasta la muerte cuando lo miro. ¡Ella estar callada es porque es una persona reprimida!-

Estos años, Xenia había ocultado todo en el fundo de su corazón.copy right hot novel pub