Xenia no supo qué decir a él en un instante, e incluso se olvidó de saludarle y se quedó allí aturdida.
Al esperar que Ólier se quedó tranquilo, Xenia escuchó la sonrisa de Óliver.
-¿Frida?-
Xenia, -... Te equivocas. No me llamo Frida.-
Ella no había usado este nombre hacía mucho tiempo, pero ¿Por qué Óliver la llamaba con este nombre durante sus varios encuentros?
Óliver suspiró profundamente cuando escuchó su respuesta.
-Independientemente de si diga el nombre equivocado o no, lo importante es que finalmente quieres conectar conmigo.-
-Desde la última vez que te encontré en el supermercado, no querías reconocerme como una vieja amiga. Estoy muy ansioso por eso, así que estoy esperando que me contactes, y por fin te he esperado.-
¿Esperaba que ella se conectara con él?
Xenia rio con frialdad, -¿Cuestas mucho con el fin de que te contacte de forma proactiva?-
-Frida, ¿crees que soy vil?-
Más que vil, ¿no?
Xenia reprimió las palabras y dijo con furia, -¿Qué quieres hacer? ¿Cuál es tu propósito?-
Quedándose en silencio durante mucho tiempo, dijo finalmente Óliver sin otros remedios.
-Quiero verte.-
-Mañana nos vemos en la cafetería en la esquina de la Calle Sal, ¿vale?-
Xenia pensaba, “¿Puedo aceptar su invitación?” Xenia recordó lo que le había prometido a Simón justo ahora. Le dijo que mañana era fin de semana, tenía que ir a la cama temprano, y ella no saldría afuera.
Aunque no escuchó su respuesta, Óliver estaba muy paciente, esperando en silencio su respuesta.
No se sabía cuánto tiempo pasó, hasta que Óliver pensó que Xenia no respondería, y ella le contestó.
-Nos vemos. Resulta que tengo algo que preguntarte.-
Después de colgar el teléfono, Xenia investigó la información sobre la compañía Clozul con su portátil en la cama.
Después de una investigación cuidadosa, descubrió que esta empresa se registró hacía tres años. Aunque solo se estableció durante tres años, fuera en el funcionamiento y otros aspectos, la compañía estaba en pleno apogeo, ya que la persona que registró esta compañía era Óliver.
Durante la investigación, Xenia también notó que Óliver cambió el apellido cuando registró esta empresa. Inesperadamente no se usó el apellido Freixa. ¿Qué sucedió?
Cuando se casó con Simón en aquel entonces, descubrió que Simón no tenía el interés común con Óliver y Leonardo. Dado que ella estaba casada con Simón, naturalmente ella y Simón eran la comunidad de intereses.
Simplemente no esperaba que Óliver hiciera tantas cosas por ella.
Aunque sabía que sería excesiva que no lo reconociera después de su regreso, pero... ¿qué podría hacer si lo reconociera?
Ella ya no era su cuñada y él ya no era su cuñado.copy right hot novel pub