Pensando en eso, Xenia frunció los labios y sonrió. Naomí era realmente perseverante, pero estaría bien. El temperamento frío de su hermano necesitaría de verdad que Naomí fuese acosadora, así que se calentaría el corazón parecido al iceberg.

Entonces, Xenia se sentó primero, miró la deliciosa comida y no pudo evitar comenzar a disfrutar.

Sin embargo, los invitados no habían llegado totalmente. No le dio vergüenza de comer primero, por lo tanto, solo pudo sentarse allí con la mejilla en una mano y sacó el móvil para echar un vistazo.

Justo en ese momento entró a la interfaz de WeChat. Cuando vio el nombre de Simón, pensó en las palabras que le dijo a su oído. Su rostro estaba caliente.

Xenia se mordió el labio inferior, creía ... que Simón realmente quería casarse con ella.

Pensando en eso, Xenia sonrió. Sus dedos blancos como nieve frotaban suavemente el nombre de Simón en la pantalla.

-Mira, mira, mira. La sonrisa reflexiona el corazón primaveral que se ondula. Hace que mi piel se sobrecoge -No se supo cuando Naomí se rio de ella de repente, y Xenia notó inclinado la vista que estaba sentada a su lado.

Había alguna duda en el corazón. Hace un momento no había nadie en el alrededor. ¿Cuándo vino Naomí de repente a sentarse a su lado a escondidas?

Al ver que la miró a sí misma con vista extraña, Naomí no pudo evitar explicar, -No me mires así. Fue que pensaba al señor Freixa con demasiada concentración. Cuando llegué aquí, te saludé sin que me escuchases.

Al escucharlo, Xenia se quedó atónita por un momento.

¿Naomí le saludó a sí misma?

¿Había alguna razón que no lo pudiese oír?

Justo cuando Xenia lo sospechaba, Naomí se le acercó con una sonrisa maliciosa, -¿Qué pensaste? Xenia, veía que tu cara estaba roja, acaso ... estabas pensando en ese tipo de cosas?

Xenia miró la carita malvada frente a ella. Obviamente, era soltera, pero cada vez que hablaba de lo de ella y Simón, tenía una sonrisa burlona intensificada e impredecible, como si lo comprendiese todo.

Pensando en eso, Xenia frunció los labios también.

-No lo entenderás después de decírselo porque no tienes novio para experimentar.

Se congeló de repente la sonrisa de Naomí.

Después de un largo rato, Naomí le pellizcó el cuello con enojo, -Bueno, Xenia. Incluso tú te reíste de mí por ser soltera.copy right hot novel pub