¡Ah! ¿Por qué no se lo devolvió?
Si ella no recordó mal, el bolsillo que puso las medicinas debió ser el mismo que puso el móvil. ¿Por qué le devolvió las medicinas pero el móvil no?
Al pensar así, Naomí estuvo muy deprimida. Pero no tuvo otro remedio de momento, de todas formas, se marchó ya. Ella sólo pudo usar el teléfono fijo de casa para llamar a Brisa.
Brisa escuchó que ella volvió a casa de anticipación, se dio cuenta de algo raro inmediatamente.
¿Qué te pasa? ¿Por qué vuelves a casa de anticipación si todo está bien? ¿No te encuentras bien Naomí?
-No, mamá, sólo que me siento cansada por pasear de fuera y hay muchos ruidos en el restaurante, por eso quiero volver a casa a dormir un poco secretamente, ¿está bien para tí?
Cuando habló, Naomí sacó la lengua hacia el teléfono y hizo mueca.
Resultó que pasó algo triste cuando hizo mueca, porque afectó las heridas y la dolió de hacer un frío grito sofocado.
-Naomí, ¿Qué pasó?-Brisa escuchó su suspiro detenidamente.
Naomí aclaró apresuradamente.
-Nada, nada, di un puntapié a la tapa de mesa con descuido, me duele...
-Chica, eres una adulta ya y todavía no sabes tener cuidado. Dar un puntapié a la mesa, ¿no es una cosa que hace una niña?
Brisa empezó a quejarse de su hija en otro lado del teléfono otra vez.
-Ay, mamá, ¿no soy de descuido? No se quejes de mí más, mis orejas van a tener las callosidades. Bueno, estoy cansada de verdad, quiero acostarme, te dejo.
-Vale, la chica jodida, sólo sabes holgazanear después de abrir el restaurante. Menos mal que tu padre y yo somos jóvenes y todavía podemos ser revueltas. Si seamos más mayores, no aguantemos tu jaleo.
-Mamá y papá sois los mejores, os quiero. Vale, no hablo más, hasta luego, besos.
Dicho eso, Naomí colgó el teléfono rápidamente, luego dio un suspiro y caminó hacia su habitación cojeando.
Ella se cambió de ropa y se acostó a la cama descansando.
Cerró los ojos después de acostarse, la cabeza llenó de lo que pasó en la sala privada.
El hombre que abocó un cigarro con una cara feroz agarró sus pelos y la arrastró hacia dentro de la sala privada con fuerzas, por fin la hizo ver todas las estrellas del cielo por una bofetada.
Mierda, cómo existió una persona tan violenta, fuera como una pesadilla.
Naomí entró en el sueño pensando en eso.
Por fin, todas escenas en su sueño fueron que ella fue pegada.copy right hot novel pub