Cuando la voz masculina procedía de la planta baja, se oyeron unos pasos apresurados.
El corazón de Xenia dio un fuerte salto y sintió que algo iba mal.
Ella acababa de conseguir que Zoe se tranquilizara, ¿se asustaría ahora?
Estaba a punto de girar la cabeza para hablar con Zoe, pero ésta ya estaba claramente irritada.Ella se avergonzó de sí misma al pensar que acababa de dejarse engatusar por las palabras de Xenia y se había puesto a llorar.
¡No esperaba que le estuviera Xenia mintiendo a ella!
Además, esos hombres estaban aquí, ¡así que la habrían capturado en el acto!
¡No, no podía ser atrapada por ellos!
Eso fue todo lo que se le ocurrió a Zoe de inmediato.
“¡Empújala!” una voz apareció en su mente.
Si la empujara, entonces los hombres de Xenia se desorganizarían y ella podría aprovechar la oportunidad para irse, ¡escaparía, escaparía de vuelta a la familia Carlos!
Con ese pensamiento, Zoe no dudó ni un segundo, acercándose y empujando la espalda de Xenia antes de darse la vuelta y correr.
Xenia no tuvo la oportunidad de hablar aunque quisiera, la posición en la que se encontraba no había nada a su alrededor a lo que agarrarse. En el punto de la caída, ella cerró los ojos y extendió la mano para proteger la parte baja de su vientre.
No...
Había luchado tanto por su oportunidad de vivir, y si realmente se destruyera así, ¿qué haría para expiar sus pecados después?
Justo cuando Xenia pensó que iba a caer, un par de manos grandes la atraparon justo a tiempo, un aroma familiar irrumpió en su respiración. Los ojos de Xenia se abrieron de golpe, chocando con un par de ojos profundos.
Los ojos fríos del hombre ya no estaban calmados, sino llenos de ansiedad, y aunque sus manos eran fuertes, temblaban suavemente.
Las pestañas de Xenia se agitaron suavemente, y trató de decir algo agarrando su camisa blanca por la emoción, pero no salió ni una palabra. No sólo eso, sino que sintió una sensación de vértigo frente a sus ojos, y cada vez más fuerte.
Al momento siguiente, se desmayó directamente en los brazos de Simón.
Desde el momento en que se encontraron, sin tener siquiera la oportunidad de decir una palabra, Xenia se derrumbó en sus brazos.
Simón frunció el ceño y la levantó enseguida en un abrazo.
-¡Id tras ella, la gente está corriendo en esa dirección!
Anthony dirigió unas personas directamente hacia las escaleras, y Lolita, que corría tras él, se detuvo, jadeaba y miraba a Xenia.
-¿Xenia? Jefe, ¿está bien ella?
Simón miró a la chica, no recordaba la cara de ella, pero al ver que estaba llena de ansiedad, debía ser la amiga de Xenia, la respondió, -La llevaré al hospital.
Con eso, Simón levantó a Xenia y se dirigió directamente hacia las escaleras.copy right hot novel pub