Vanesa llegó a casa por la tarde, y mucha gente del pueblo sabía que había vuelto, así que vinieron a verla.
Esas personas vieron que los ojos de Vanesa estaban rojos e hinchados de tanto llorar, y todos sabían por qué.
—Vanesa, mi familia ha cocinado hoy una comida deliciosa, ¿por qué no vienes a comer a mi casa? —dijo Micaela.
—Tía, primero quiero descansar, estoy un poco cansada después de caminar mucho tiempo —dijo Vanesa.
Micaela se apresuró a asentir con la cabeza y dijo:
—Sí, sí, me olvidé de eso, tú descansa primero y yo te traeré la comida.
Había otras personas en el patio. Cuando su abuelo falleció, Vanesa no sabía nada y fueron estas personas las que ayudaron a organizar el funeral.
Vanesa movió algunas sillas para que todos se sentaran y luego se sentó sola en el patio.
Un anciano dijo que la madre de Vanesa había vuelto hace tiempo y parecía querer reconocer a Vanesa.
En ese momento Micaela se acercó con la comida y dijo:
—¿Reconocerla? ¿qué está pensando? No le va bien y sabe que su hija está casada con un hombre rico, así que volvió. ¿Qué había estado haciendo antes?
El anciano suspiró y continuó diciendo a Vanesa:
—La última vez que tu madre volvió, vi que iba vestida muy sencilla, y supongo que la vida no ha sido muy buena durante tantos años. No podemos tomar tus decisiones por ti, pero Vanesa, no te queda otra familia y somos los que te hemos visto crecer, así que si tienes alguna idea sólo dilo y te ayudaremos para que no te lo pondren difícil.
A Vanesa se le volvieron a saltar las lágrimas y trató de controlar sus emociones diciendo:
—No la reconozco.
La decisión que tomó fue comprensible para todos. El hombre que estaba a su lado también suspiró y dijo:
—Has tomado la decisión correcta. Cuando tu abuelo falleció, esos dos ni siquiera volvieron. Si tuvieras una buena familia, tu marido no habría vuelto contigo esta vez. Debe ver que ya no tienes familia y no se preocupa por ti en absoluto.
El anciano se apresuró a decir:
—Román, no digas tonterías.
Vanesa sabía que el hecho de haber vuelto sola esta vez era algo muy fuera de lugar a los ojos de los demás.
Nadie de la familia Icaza había venido a su pueblo natal.
Cuando su abuelo murió tras una larga enfermedad, la familia Icaza había planeado venir a ayudar a Vanesa en el funeral.copy right hot novel pub