Elsa no debería haberse sorprendido de la noticia de que Drácula envió a Osip a buscar a Charles. Aun así, escuchar las noticias mías la sacudió hasta el fondo. Un mundo lleno de vampiros para contener era bastante malo, pero esconderse de un hermano que compartía los mismos lazos genéticos familiares sería casi imposible. Se sentía vieja, cansada y abrumada. Lo que ella no daría por tener el poder de aplastar a esos vampiros como los bichos que eran.
Shen sintió la necesidad de liberar la tensión física y mental y fue a un estudio de artes marciales cercano para entrenar. Llamó por teléfono, afirmando que había perdido la noción de la época y que haría todo lo posible para luchar contra el tráfico y regresar lo más rápido posible. Por lo tanto, esperábamos; cada uno en el pensamiento profundo y apenas recordando la presencia del otro.
Nandru fue el primero en ver a Shen saliendo del taxi. Saltó ansiosamente a sus pies mientras anunciaba su llegada. Shen ni siquiera tuvo la oportunidad de entrar en el motel y cambiarse de ropa. Demasiado tiempo ya se perdió y ninguno, Elsa incluido, estaba dispuesto a esperar un segundo más para comenzar nuestra búsqueda.
A Elsa le hubiera gustado abandonar la búsqueda y regresar a casa para ver la protección de Charles ahora que Osip estaba en la foto. Desafortunadamente, ese vampiro vil todavía tenía a Tatyana cautiva y con sus ojos de águila observándola cada movimiento, ella pensó que era mejor continuar con nuestros planes para la noche.
Tuve la previsión de agarrar la mochila de Shen. Lo tiré sin contemplaciones mientras se disculpaba una vez más por su tardanza. Al darme cuenta de lo agresiva que podría haber aparecido mi acción, contemplé explicarle que mi mal humor no tenía nada que ver con su tardanza y más que ver con mi reciente conversación con nuestro vampiro residente, pero eso implicaría entrar en detalle frente a Elsa y Nandru. Por lo tanto, me conformé con simplemente afirmar que estaba bien y no hay necesidad de ser mencionado al respecto.
Dado que Ken y su alegre grupo de buscadores paranormales iban a reunirse con nosotros, nos faltaba el uso de sus camionetas y nos vimos obligados a llamar para el servicio de taxi. El sentido de urgencia era espeso cuando nos amontonamos de nuevo en la cabina y le dimos al conductor las indicaciones hacia nuestro destino. El conductor vaciló. Queríamos ir al valle oeste y rara vez dejaba el lado este. Se acercó a alojarse lo más cerca posible del aeropuerto o del hotel fenicio. Se encogió de hombros con las molestias después de que ofrecimos una propina considerable para agregar a la tarifa considerable que recibiría.
Seleccionamos un lugar en el borde occidental de Waddell que parecía estéril. Al no ver una casa en la que dejarnos, el taxista vaciló. No tenía idea de lo que estábamos tramando, pero no quería ser parte de algo sórdido. ¿Por qué alguien tomaría un taxi desde old Town Scottsdale a Waddell y luego saldría en medio de la nada? Apestaba a juego sucio. Sus protestas por no querer participar en nada que pudiera ser turbio resultaron en una propina más fuerte de lo que podría haber imaginado. Lo aceptó con entusiasmo, junto con su tarifa ya escalada, y prometió regresar al amanecer para recogernos.
Miró en su espejo retrovisor mientras se alejaba y se estremeció. No le gustaba la apariencia de un tipo. Era alto, oscuro, con una eeriness sobre él. Tenía ojos azules locos que parecían pertenecer al diablo mientras se llevaban en el alma de una persona. Se alegró de librarse de nosotros y de los buenos montados. El conductor sabio de la calle se rió a sí mismo mientras pensaba en nosotros estando varados en medio de la nada, porque seguramente, no esperábamos que honrara su palabra y regresara.
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La caminata a través del terreno rocoso y montañoso en medio de la noche estaba gravando el cuerpo de Elsa, pero no quería ralentizar al grupo quejándose. Nos habíamos reunido con Ken y su pequeña tripulación al comienzo del Parque De tanques blancos. Después de varias noches buscando millas y millas de la ladera de la montaña de Arizona y subiendo con las manos vacías, su tripulación estaba más decidida que nunca. Produjeron equipos que usaron para la investigación paranormal con la esperanza de que nos ayudara a captar el movimiento de Bruce. Esta noche fue la noche. Si estuviera cerca, lo encontraríamos.
Nos dividimos en grupos de dos. Elsa optó por permanecer cerca de Nandru. Ella no confiaba en él, si se encontrara con Bruce primero. El conocimiento de que esta criatura estaba buscando su carga infantil, manteniendo a Tatyana como rehén, y albergando a su hermano vampiro hizo que su piel se arrastrara. Se necesitó toda su fuerza de reserva para actuar hacia él como lo había hecho desde que comenzamos nuestra loca asociación.
Shen y yo nos asociamos y nos aseguramos de que nos quedemos cerca de ellos, mientras les damos espacio. Puede que Elsa no haya confiado en Nandru, pero Shen y yo no estábamos seguros de que confiábamos en ninguno de ellos. Había demasiada tensión en el aire y demasiadas agendas ocultas para mi comodidad.
Nandru estaba molesto con todo el equipo electrónico y la parafernalia que la gente de Ken trajo consigo. Descubrió que sus frecuencias nublaban sus habilidades para distinguir los sonidos de la noche. Uno de los factores que las criaturas de la noche apreciaron fue que la raza humana se desaceleró por la noche. Esto, a su vez, redujo el uso de las energías y las ondas de aire, haciéndolos más alcanzables, así como poderosos. A pesar de que Ken y su gente estaban en un lugar diferente del parque, sus frecuencias seguían interfiriendo con la suya.
"Esos cazadores de fantasmas no son nada, si en el camino", gruñó de frustración.
"Necesitamos sus ojos y oídos. Se nos está acabando el tiempo. Si no consigo esta poción Bruce pronto, no habrá necesidad de intentarlo. Se habrá vuelto para siempre", sibilaó Elsa.
Necesitaba sentarse un minuto, pero su condición era ser extrañada por su compañero o ignorada.
"Esta noche es la noche. Tiene que serlo", dijo.
La determinación en su voz bordeó la urgencia. Si no capturaba a Bruce mientras Dragomir y Osip estaban preocupados, no estaba seguro de si sería capaz de escapar para intentarlo de nuevo. También estaba la cuestión del confinamiento encomendado de su pueblo a considerar. No podía mantenerlo en su lugar por mucho más tiempo sin levantar sospechas. De hecho, puede que ya sea demasiado tarde. Un confinamiento de esta naturaleza rara vez se puso en vigor y, entonces, nunca durante tanto tiempo. Los vampiros estaban murmurando sobre su razón a estas alturas.
"Necesitamos encontrarlo esta noche o es mejor que no nos molestemos en mirarlo en absoluto", dijo Elsa.
Su tono sonaba menos determinado y por una buena razón. Con esta nueva información sobre Osip, cuestionó lo sabio que era ayudar al vampiro a capturar a Bruce. Después de todo, tendría en su poder dos de los tres Drácula deseados. No había un vampiro en el planeta que no tuviera el ojo puesto en la piel del pobre Charles. Con las conexiones de Osip con el bebé, sería sólo cuestión de tiempo antes de que encontraran al bebé. Tenía un plan para destruir a los vampiros que tenía la intención de poner en acción tan pronto como Tatyana estuviera a salvo en su protección, pero ¿y si fracasó? Entonces, ¿qué? Ella anhelaba estar de vuelta en la comodidad de su habitación de hotel donde podía entrar en trance y hablar con los espíritus. Necesitaba ayuda con este problema de las fuentes superiores. Esta situación tenía que ser la peor en la que se había encontrado durante sus muchos años en esta vida.
Los sonidos de las rocas que se deslizan llamaron nuestra atención y nos detuvimos para identificar la fuente. Nandru olió el aire para comprobar el tipo de sangre.
Elsa se había centrado en pulir sus habilidades telepáticas oxidadas en los últimos días hasta el punto de que excedían las de Nandru. Se agachó la cabeza, cerró los ojos y los usó.
Tatyana, oh Tatyana... ¿Qué ha pasado? ¿Dónde has ido? ¿Te encontraron mientras cazaba? ¿Te han llevo? ¿Quién era, querida? ¿Era un vampiro? Le arrancaré la garganta. Mi amor... Te necesito.copy right hot novel pub