Luis Francisco, no podía creer lo que escuchaba. Sintió como si recibiera un fuerte golpe en el pecho que hubiese logrado que su corazón se detuviese. Su cerebro se negaba a procesar aquellas palabras brotadas de la boca de su esposa.
Su esposa, la única mujer en su vida, la que había amado desde que era solo un joven de universidad, la que había adorado en cuerpo y alma durante tantos años, la misma que dormía a su lado desde el día en que se casaron.
¡Su esposa, su esposa tenía un amante!
¡No podía creerlo!, sencillamente le costaba hacerlo. Nunca había mirado a otra, nunca si quiera se había imaginado en brazos de otra, nunca le había fallado, desde aquella vez; la primera en que la amó, su cuerpo nunca había sido tocado por otra mujer, por otras manos que no fuesen las suyas. Ahora resultaba que ella lo había engañado, tenía un amante.
¡Tenía un amante!
Aquello sin duda era un duro golpe.
Un sollozo brotó desde las profundidades de su ser. La miró a través de una cortina de lágrimas.
-¿Un amante?, ¡tienes un maldito amante!
-Luis Francisco. . .
-Te revuelcas con otro hombre y luego vuelves a casa con tu porte de señora, con tu cara bien lavada y te acuestas junto a mi- la mira con inmenso dolor.-¿Cuánto tiempo haces que te rebajas a tanto?, ¿cuánto tiempo hace que te comportas como una. . .?, no lo puedo creer- dice ahogado en llanto- te he amado desde que te conozco, te he respetado Lisa Castillo,después de tí, jamás me he atrevido a tocar a otra mujer, nunca, nunca he puesto mi deseo en alguien más, nunca le he hecho el amor a otra mujer y ahora tu. . .
-¡Por supuesto que miras a otra!- dice llorando- ¡me eres infiel con una maldita botella de licor!
-Una botella de licor no gime entre mis brazos, ¡NO TE JUSTIFIQUES!-grita limpiándose las lágrimas.
-No lo hago-su voz sonó ahogada- soy culpable, muy culpable- dice- pero tu también lo eres.
-¡Si claro!- responde con ironía- ¡yo te mandé a que te comportaras como una ramera!
-¡NO ME OFENDAS!
-¡TU NOS OFENDISTE!- responde dolido. Da un par de pasos atrás y se aleja de ella. La mira de arriba a abajo- por lo menos pudiste tener la decencia de quitarte de la piel el olor de ese hombre, debiste al menos recordar que tu marido creía en tí, confiaba en tí, debiste pensar en que tu esposo siempre te creyó una santa, una mujer digna y honorable.
-No te pido que me entiendas- dice llorando- sé que debe ser difícil.
-No lo sabes Lisa, porque yo nunca te he engañado.
-Luis Francisco. . . .Sé que sonará loco y descabellado, pero yo te amo- gimió.
-Claro, es por eso que en nombre de ese amor, has decidido calentar tu cuerpo en otra cama, ¡en otros brazos!- gimió- permitir que otro te tocara, que otro pusiera sus manos sobre ti.
-Sé que no podrás comprenderlo, porque si tu. . .si tu tuvieses una amante y el caso fuese contrario, yo. . . estaría completamente destrozada, te he lastimado, te he herido de la peor manera, pero quiero que sepas que no fue planificado, no fue intencional, mi amor- él hizo un gesto al escucharla llamarle así.copy right hot novel pub