Sin tan siquiera preocuparme por mi herida, corro lo más rápido que puedo para ir a ver a mi padre.
Regreso al interior de mi cuarto y para entonces es que Connrad con los guardias consiguen abrir la puerta al pegarle en el cerrojo con una maza.
Connrad al verme se postra de rodillas y me pide disculpas muy arrepentido:
—Su Alteza por favor le pido que me perdone por no haber podido entrar antes. Es que esa puerta está muy reforzada y no fue fácil conseguir abrir....
No termina la frase y es cuando nota la sangre en mi brazo y acude a comprobar la herida a la vez que menciona asustado:
—¡Pero si está herida, por favor permítame llevarla con el médico!
Yo prácticamente ignoro lo que me dice y sin detenerme salgo al pasillo.
El comandante me pregunta muy confundido al verme comportar de ese modo:
—¿Pero su alteza que le sucede? ¿Hacia dónde va?
Yo no le doy respuesta pero Matteo si lo hace cuando le da cruce por el lado:
—Es su padre el anterior rey. Ella cree que le puede haber ocurrido algo. ¡Vamos rápido!
Después de haber corrido con todo lo que tengo, por fin logro llegar al frente de los aposentos de mi padre. Pero no he entrado todavía y ya noto un mal indicio, al encontrarse la puerta abierta.
Me invade un temor inmenso de no querer ver allí dentro, pues solo la idea de haber sucedido algo terrible es lo que llega a mi mente.
Dudo durante un segundo, pero decido continuar a pesar de todo y en cuanto doy el primer paso dentro siento un fuerte aroma a sangre que me hace devolverme.
Entonces llegan al lugar Connrad, Matteo y el resto donde me encuentran a punto de caer en llanto.
El comandante me pregunta con voz sutil. —Su alteza... ¿Su padre se encuentra bien?
—Connrad, la verdad no sé. No fui capaz de atreverme a entrar cuando sentí el olor a sangre... Ve y comprueba de una vez que es lo que sucedió.
—Como usted ordene su alteza.
El comandante cumple con lo que le pido y se adentra al cuarto.copy right hot novel pub