El policía que tomaba la transcripción era un joven con poca experiencia, Yadira y Noela fingían ser inocentes y lastimosas, los policías se pusieron dudosos, debido a que no podían creer que las dos chicas, que parecían delgadas y débiles, golpearan a los dos hombres hasta tan heridos.

Aunque los policías tenían dudas y supieran que Yadira y Noela realmente les golpearan, no lo dirían claramente, al fin y al cabo, odiaban más a este tipo de violadores.

Había muchas cosas que se podían explicar bien a través de razonamientos, era bueno hacer a estas personas malintencionadas que recordaran esta lección.

Los dos hombres que fueron golpeados naturalmente no estaban de acuerdo.

Uno de ellos dijo en voz alta, -¡Señor, realmente me golpeó! ¡Lo juro por Dios!-

El policía puso cara seria y preguntó con seriedad, -¿Hay alguna prueba?-

Esta pregunta era un poco complicada.

La entrada al camerino estaba vigilada, pero el interior no. Además, la persona que los contrató para que tomaran fotos de Noela apartó a todos para poder cumplir su plan, ¿dónde podían conseguir pruebas?

El hombre estaba insatisfecho, -¡Claro que investigar las pruebas era vuestro trabajo de policías!-

Yadira miró al hombre con frialdad y dijo en tono serio, -Podéis optar por acusarnos.-

El hombre fulminó a Yadira directamente y no dijo nada.

Acusar tal caso pequeño no sólo gastaría mucho dinero y la energía, sino también conseguirían muy poco dinero incluso ganarían el pleito, además, lo hizo sólo para ganar dinero, no merecía la pena provocarles tantos problemas por ello.

Al final, las dos personas que intentaron tomar fotos de Noela no sólo fueron golpeadas por Noela y Yadira, sino que también tuvieron que estar detenidas en la cárcel durante medio mes.

Delfino vino siguiendo a Apolo, y cuando Apolo estaba hablando, se quedó callado.

Cuando salió, Yadira pasó frente a él y su brazo fue agarrado de repente.

Yadira intentó sacar su brazo, pero no lo logró. Alzó la cabeza y le miró con impaciencia, cuando estaba a punto de hablar, sonó la voz indiferente de Delfino, -¿Todo bien?-

Los dos discutieron anoche, y Yadira mostró una expresión molesta, -¿Qué crees que me pasa? ¡Suéltame!-

Le molestaba más que este hombre siempre le arrastrara sin soltar.

Cuando le gustaba alguien, sentía que incluso la forma en que se hurgaba la nariz era particularmente atractiva, pero cuando lo odiaba, se sentía molesto cuando lo veía.

La expresión de Delfino cambió de repente y las emociones en sus miradas eran complejas y difíciles de distinguir.

Después de dos segundos, soltó a Yadira.

Yadira pasó directamente a su lado.

Cuando llegó al vestíbulo de la comisaría, vi a Noela rodeada de dos mujeres policía, hablando con sonrisa con ellas.

Yadira se acercó y escuchó su conversación.copy right hot novel pub