-Yael: Vaya, coincidimos en algo

(Se escuchó un bufido de parte de él)

-Edward: ¿Dónde está él?

-Yael: No tengo intenciones de alargar esta llamada, ven mañana a mi oficina, quiero hablar de Jayden

(Se escuchó una risa irónica proveniente de Edward)

-Edward: Yo no soy el que quiere hablar, si tanto deseas hablar de tu noviecito, te espero en mi oficina, sé que no hace falta decirte la dirección, porque veo que te encanta saber de mi

-Yael: No me interesa donde sea, te veo ahí

(Terminó la llamada. Estaba agotado por todo lo que ocurrió esta noche, pero la persona recostada a su lado lo tranquilizaba. No entendía como desde la primera vez que lo vio, no lo sacó de su mente)

(A la mañana siguiente Jayden despertó por el sonido de un par de suaves golpes en la puerta. Se levantó de la cama para abrir la puerta, teniendo frente él a un señor de cabello canoso, vestido de un traje gris impecable, con algunas arrugas en su cara, pensando que probablemente tenga entre unos 72 o 75 años)

-Jayden: ¿Disculpe, usted es…?

-Xx: No se preocupe por mí, trabajo en esta casa, vine a preguntar si necesita algo

-Jayden: Gracias, estoy bien

-Xx: Entiendo, cualquier cosa me dice

-Jayden: Si…

(El señor estaba por marcharse cuando de pronto le preguntó algo)

-Jayden: Una pregunta ya que está aquí… ¿Sabe donde está Yael?

-Xx: El señor salió esta mañana

-Jayden: ¿No dijo a donde?

-Xx: No, lo siento

-Jayden: Gracias, igual

(Y fue así que cerro la puerta después de que él se fuera. En algún momento de la noche debió quitarle la ropa para ponerle la pijama que traía ahora. Pijama que por supuesto le quedaba grande)

(Fue al baño a lavarse la cara para lograr despertar completamente. Bajó a la cocina buscando su celular encontrándolo cerca de la ventana, no recordaba haberlo dejado ahí)

-Xx: ¿Ya se va?

(Un ligero brinco de susto fue la respuesta a su pregunta)

-Xx: Lo lamento, no quería…

-Jayden: No, no hay problema. Ya me tengo que ir, tengo algo que resolver… me olvidaba ¿Cómo te llamas?

-Xx: Dígame Frederick

-Jayden: Okay Frederick, yo soy Jayden

-Frederick: Lo sé, no hay día que el señor no diga su nombre

(Se pudo ver como la cara del pequeño se ponía cada vez más colorada)

-Jayden: Bueno, me voy…

-Frederick: ¿No necesita que lo lleve a algún lado?

-Jayden: No te preocupes, puedo pedir un taxi

-Frederick: Insisto, el señor me dijo que lo sirviera en lo que necesite, y si le soy sincero no me apetece quedarme sin hacer nada aquí en la casa

-Jayden: Pero si es un trabajo de en sueño no hacer nada

-Frederick: Para los jóvenes, a mi edad te empieza a cansar estar en un solo lugar

-Jayden: Bueno Frederick ¿Me llevas a mi casa?

-Frederick: El auto está listo

(De algún modo Frederick transmitía un lindo aura, con el esmoquin que usaba parecía un señor importante, pero cuando sonreía se veía tan tierno que parecía más un lindo abuelito)

(Llegaron a su casa después de que Jayden le diera indicaciones, todo el viaje hablaron de como era trabajar para Yael)

-Jayden: Después seguimos hablando mal de él

-Frederick: ¡No, no me quejaba, es estupendo trabajar para él!

-Jayden: Estoy jugando

-Frederick: Eres un gran chico, esta vez eligió bien

-Jayden: ¿Esta vez?copy right hot novel pub