(Un latido recorrió todo su cuerpo. Fue tan inesperada la pregunta que su cabeza parecía no procesar. Su mente estaba en blanco. Su voz no salía. Y dio la respuesta universal para preguntas a las que no encontramos respuesta)

-Jayden: No sé

(Si sabía, claro que lo sabía, pero algo lo detenía. Una cosa es saber el miedo de una persona, otra diferente saber el origen. No quería que por cosas de hace años, algo fuera a cambiar)

(Yael entendió que no quería hablar y no insistió, solo asintió con la cabeza y siguió conduciendo. Pero no era que no quisiera hablar, por primera vez en 10 años quería hacerlo, pero encontraba las palabras adecuadas)

(El pequeño lo miró, con él encontraba una tranquilidad que le hacía querer sonreír. Observó que tenía curiosidad y no pudo negarse)

-Jayden: La oscuridad es hermosa, mira ahora el cielo, las estrellas están brillando gracias a ella. Te aseguro que no es nada contra ella, pero desde niño tuve ese miedo, y siempre decía que cuando creciera desaparecería, pero al parecer mientras más creces empiezas a ver lo que las personas hacen aprovechándose de ella

(No era algo fácil de contar, pero hace tiempo que no le afectaba ese tema, solo que no le había contado nunca a nadie acerca de eso)

-Jayden: Tenía 9 años cuando me sentí valiente por primera vez, recuerdo bien que salí de mi casa alrededor de las 8 pm, ni siquiera era tan tarde, salí a comprar algo a la tienda con el dinero que había encontrado en la calle el día anterior, tienda que quedaba a dos calles de mi casa, hasta recuerdo lo que iba a pedir… “Una paleta azul”

-Yael: ¿Cómo saliste sin que tu padre se diera cuenta?

-Jayden: Ese día mi padre había llegado ebrio a la casa y estaba profundamente dormido

-Yael: Entiendo…

-Jayden: Justo a una calle de llegar, un señor se acercó a mí y me empezó a preguntar donde vivía, yo solamente seguía de largo, con un miedo horrible, claro, hasta que se atrevió a tomar mi muñeca, yo forcejeé con él, pero claramente no podía hacer nada, me llevó a una calle totalmente oscura que se encontraba cerca, él tapaba mi boca… yo quería decirle que me dejara … Y justo en la noche que me sentía más valiente, regresé llorando a mi casa

(Pudo notar como apretó el volante con fuerza. Y su mandíbula se tensó)

-Jayden: Entonces sí, no me da miedo la oscuridad, le temo a las personas que se esconden tras ella

-Yael: ¿No se lo contaste a tu padre?

-Jayden: Mi padre ya tenía demasiados problemas debido a sus deudas, no quería causarle otro. Me enfoqué más en mis estudios y fue ahí que conocí a Ricardo, que aunque a él también le gustan los hombres, no era mala persona, y fue así que me fui olvidando de eso, al estar en la oscuridad, no recuerdo eso, pero al parecer inconscientemente sé que algo malo puede sucedercopy right hot novel pub