Suspiro mientras giraba su silla hacia la ventana, la casa de su padre era custodiada por algunos lobos estando o no su padre en la residencia, siempre había alguien vigilando. Escucho ruidos de ollas en la parte de abajo, su hermana estaría haciendo un desastre ya que no sabía cocinar nada ¿Cómo pretendía casarse? Solo él era quien cocinaba, se picó el puente de la nariz encaminándose hasta la puerta, no le quedaba de otra que ayudar a Megan. Total él también estaba hambriento.
—Shery creo que escuche ruidos abajo.
—Shh… Duerme seguro que es papá.
—Está bien mañana tenemos colegio.
—No iré más.
—¿De qué hablas? Si ya estas a punto de graduarte.
—Necesito más horas de trabajo Eve, reunir más dinero no puedo perder el tiempo estudiando.
—¡Estás loca! Su hermana se levantó de la cama enojada sentándose en la de ella.
—Ve a dormir Eve no hagas ruido, seguro papá llego todo borracho.
—Es que no puedo creer que vayas a dejar la escuela.
Era un hecho que había abandonado la escuela, lo único malo es que salía muy tarde del trabajo y por otro lado Eve se vería obligada a llegar sola al café para regresar juntas a casa, le daba miedo tener que dejar que ella anduviera sola, pero tenía que hacer ese sacrificio por las dos. Apenas llevaba dos días trabajando, pero con lo que ganaba en poco días estarían fuera de la casa de Daren y muy lejos.
Esa noche al salir del trabajo tendría que verse con Eve en el parque, al salir del colegio se reuniría con un grupo de chicas para adelantar materias, claro todas ellas la seguían porque su hermana era un cerebrito en todo el sentido de la palabra.
Había mucha diferencia entre ellas, porque al contrario que Eve para ella estudiar era una pesadilla. Solo se inscribió en el colegio para poder acompañarla a su pequeña hermana, ya que desde pequeña, siempre quiso trabajar para poder salir de aquel hueco de casa.
—Vamos Shery que tanto piensas, lleva tus órdenes a la mesa.
—Si, disculpa estoy en otro mundo.
—Siempre lo mismo muchacha. Lleva esto a la mesa dos y tres.
Tomo las bandejas. Pero aún así seguía pensando que su hermana había salido hace cuatro horas y su turno terminaba en media hora, estaba nerviosa casi nunca estaban separadas a esas horas de la noche, solo esperaba que su padre no se volviera loco por la hora de llegada. Bueno tampoco es que le pedían muchas explicaciones.copy right hot novel pub