Y después de tanto discutir, accedieron a llevar a Megan quien fue a por ropa y comida para el viaje. Para poder llegar más rápido se transformaron en lobos y Shery subió a espaldas de Ethan con todo el miedo del mundo. Para luego emprender el viaje.
El elegante coche negro de Daren aparcaba en su estrafalaria mansión, este se bajo contento que uno de sus negocios estaba yendo viento en popa. Y muy pronto tendría a la albina en su poder para que engendrara a su hijo, y por si no fuera mucha felicidad esa noche gozaría del delicioso cuerpo de Shery toda la noche. Entro en su casa y subió directamente a la habitación, la cual encontró vacía.
—¡Shery! Llamo. —¡Maldita perra! SHERYYYYYY. Grito furioso.
La furia le subió desde los pies hasta la cabeza explotando una gran rabia en su sistema, allí mismo se transformo en un enorme lobo cual gruñía como la bestia que era. Estaba fuera de sí, no era racional. Destrozo todo a su paso, toda la habitación quedo en ruinas. Daren salto desde la ventana de la habitación haciendo añicos el cristal.
Cayo en suelo, levanto el hocico olfateando el aire. La buscaba, no le sería difícil encontrarla. Pero no fue así. Si se había escapado pero no podía olerla desde allí. Pero no había que ser un genio para saber a dónde se dirigía. Se fue por el bosque, y al instante todos los chicos llegaron a él. Les dio instrucciones que la encontraran. Estaba furioso, la mataría.
Los lobos se dispersaron en busca de la humana. Pero él, personalmente iría hasta esa maldita aldea. Allí la encontraría y asesinaría a todo aquel que viviera allí. Guiado por la ira recorría el camino como un salvaje, después de varios minutos llego al pueblo de la manada luna Azul pero algo extraño paso. Ella no estaba allí.
El maldito crio de Lobo tampoco estaba, estaban juntos lo que causo un corto en el cerebro de Daren. Los celos se arremolinaban en todo su ser. Miraba el pueblo desde una distancia prudente, para cerciorarse que no estuviera allí. Pero efectivamente no lo estaba. Se la había llevado a otra parte. Asesinaría a todo vigilante de su maldita casa.
Los cuatro chicos llevaban varias horas corriendo sin detenerse, Shery estaba agotada mientras iba a lomo de Ethan. Era extraño estar montada encima del chico que te gusta en forma de un enorme perro negro. Era la primera vez que lo veía y se sorprendió bastante cuando este se transformo.copy right hot novel pub