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Princesa Vampiro (Parte 1) / Princesa Vampiro (Parte 2) Con Franqueza

Un dolor de cabeza constante (PARTE 2)

No supe en qué momento me quedé dormida en los sillones de la habitación, mi dibujo quedó inconcluso, le hacían falta algunos detalles; me miré al espejo y descubrí que tenía tiza en toda la cara, las manos y el vestido, así que me apresuré a cambiarme, justo a la mitad una mucama me fue a avisar que el desayuno estaba listo; esta vez no me perdí, ya tenía mejor orientación.

-Buenos días espero no haberlos hecho esperar- sonriendo hice una reverencia, al levantar la mirada pude ver a la reina Marianne, el rey Aker y otro hombre.

-Buenos días- todos se levantaron e hicieron una reverencia.

-Rey Cromwell le presentó a la reina Iliana-

-Es un placer- se acercó a mí y me besó la mano; rey Cromwell, me suena conocido ese nombre; al ver al príncipe Aker note que seguía bastante molesto.

-El placer es mío, rey Cromwell- me senté cerca del príncipe.

-He odio hablar mucho de ti- me miró fijamente el rey, un escalofrió me recorrió todo el cuerpo; nos sirvieron la comida.

-Me halaga- creo que no debía contestar así ¿Por qué contesté así? se me erizó aún más la piel.

-¿Dónde ha oído hablar de ella? Claro si es que quiere decirnos- dijo la reina Marianne.

-De mi hijo Frederick- tosí porque estuve a punto de ahogarme con la comida, ahora sé de dónde conocía ese nombre.

-Ah que interesante- contestó la reina.

-¿Y qué asuntos tiene con la reina?- preguntó el príncipe Aker sin una pizca de cortesía.

-Cuestiones del matrimonio- pude ver debajo de la mesa como le crecían las uñas al príncipe Aker, la reina Marianne y yo nos miramos, como si con la mirada pudiéramos comunicarnos, me parece que ella sabía lo molesto que estaba el príncipe Aker.

-Usted ya está casado- contestó el príncipe.

-Viudo desgraciadamente- el rey Cromwell se tocó el pecho y agachó la cabeza; la reina Marianne le hacía gestos al príncipe Aker, parecía estarlo regañando.

-Lamento la imprudencia de mi hijo-

-No se preocupe reina Marianne- besó la mano de la reina.

-Con permiso, tengo asuntos que debo atender- el príncipe Aker se levantó, vi su plato y estaba casi intacto, de repente el ambiente comenzó a ser bastante tenso.

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