Inmediatamente después, la mayoría comenzó a gritar y a correr, el príncipe Aker se encontraba conmigo en el piso, con la nariz sangrando, él me revisó con la vista de espaldas a todos y una brisa con tierra nos rodeo, evitando que pudiera vernos alguien con más detenimiento, el príncipe me tomó entre sus brazos cuidadosamente y me sacó del castillo, estaba en el cielo y no sabía qué hacer o decir, me sentía tan débil, inmediatamente vi que algunos Deus entraron por el vidrio roto, miré al príncipe con desesperación esperando que pudiera hacer algo.

-No me mires así, no puedo hacer mucho por ellos- tomé aliento.

-Es mi culpa- dije con mucho esfuerzo.

-Al parecer solo bebes la sangre suficiente, si fueras humana esa caída te habría matado-

-Creo que me rompió la espalda- dije jadeando un poco.

-Ahora no sé donde dejarte, temo que vengan los deus a terminar el trabajo- yo lo miré un tanto confundida, aun que me hacia una idea de a qué se refería –a matarte- ya lo sabía, no era necesario que dijera lo último; me sentía muy cansada, así que repose mi cabeza en su pecho, podía escuchar y sentir el palpitar de su corazón, la brisa terminaba de calmarme, nada mal para haber sido el primer enfrentamiento, si hubiese resultado un fracaso ya estaría muerta, de hecho si Evil hubiera querido me habría matado, puesto que no le fue muy difícil inmovilizarme y arrojarme al piso sin siquiera poder reaccionar.

-No te muevas de aquí- el príncipe Aker me dejó en una pequeña cueva, creo que él no lo pensó muy bien, quizá creyó que así no estaría a la vista de los Deus, sin embargo, no previno que seguía teniendo sangre en el cuerpo, así que podían encontrarme por el olor; me sentía tan cansada como para cerrar mis ojos y reposar un momento hasta quedarme dormida, pero no podía hacer eso, si un Deus se acercaba y me encontraba en se estado, le sería más fácil eliminarme; en este instante me siento tan inútil, supongo que Evil ya no dejó pasar el que yo salvará a las personas de mi palacio ¿Por qué no me mató? Esa es la incógnita que no deja de rondar en mis pensamientos. Sentí que pasó una eternidad, me perdí un momento, dejé de pensar, mi mente se quedó en blanco y de repente regresé, el príncipe Aker había regresado por mí, tenía mi vestido y su atuendo lleno de sangre.

-¿Qué sucedió?- dije un poco afónica.

-Ya no hay sangre tuya en el piso del palacio.

-¿Estas herido?- dije ya con la voz un tanto más clara.

-Esta sangre no es mía, es la que absorbió la ropa cuando te estaba cargando; necesitas lavarte esa sangre, aun que tus heridas se cierren la sangre no desaparece por arte de magia- yo traté de enderezarme, pero aun me costaba, al menos ya podía moverme un poco más –aun estas muy débil, toma esto- me lanzó una bolsa de sangre, yo la tiré de nuevo al piso.

-¿Para qué?- él la levantó y limpió la tierra que se le había pegado.

-No voy a cargarte todo el camino y necesitas curarte lo antes posible para que regresemos al palacio.

-¿Debemos regresar?- ya me sentía con más energía para poder hablar.

-Tardas demasiado- el príncipe me cargó de nuevo y me llevó volando al lago más cercano, me dejó cuidadosamente en la orilla.

-¿Por qué no estás enfadado conmigo?-

-Por qué ya lo había hecho antes-

-¿Hacer qué?- él me dio de nuevo la bolsa, al principio no quería beberla de ese modo, pero cuando comencé a beber no podía dejar de hacerlo, cada vez era más dulce, y me sentía tan aliviada, como si bebieras un vaso de agua después de un maratón.

-Debes dejarme aun que sea un poco- después de que lo dijo le di la bolsa, pues estaba a punto de acabarme la sangre.

-¿Cómo que ya lo habías hecho antes? ¿El pelear con los Deus?-

-No, el evitar que se lleven gente de mi reino, pero era mucho más joven que tú-

-Osea a los…- no terminé la oración esperando que me dijera.

-14 años- curiosamente si me dijo, un momento ¿Entonces por qué dejó de intentarlo? ¿Le habrá hecho lo mismo Evil? En mi cabeza hay tantas dudas.

-Entre más me mires así, no me darán más ganas de contarte-

-Sé que es personal, pero tengo mucha curiosidad-

-¿Ahora también debo tacharte de entrometida?-

-Auch, es triste que me diga de ese modo, sería...más informativa-

-Te metes en los asuntos de los demás, eso no es ser informativa, esa palabra es una mejor forma de decir chismosa ¿así que también eres chismosa?-

-Solo un poco-

-¿Cómo puedes actuar de ese modo después de estar al borde de la muerte?- dijo entre risas, yo encogí los hombros.copy right hot novel pub