Mi niño Darek cumplía 2 años, estaba demasiado feliz, y le regalé su primer retrato de cuando era un bebé y un dibujo mío, pero ese me lo había pedido anteriormente. Jenny y yo hicimos el pastel desde la mañana, fue demasiado difícil pero lo logré, pude ser una buena ayudante... rompí dos huevos en el proceso pero se pudo. Después de la junta le envié una carta a Aker, explicándole lo que había sucedido con el rey Kevin, él no quiso hablar mucho del tema, quizá siga molesto con el rey, solo espero que no haga algún escándalo o algo parecido.

Einar estuvo jugando con mi pequeño, Evan hacia sus deberes como guardia principal mientras nosotras hacíamos el pastel.

-Nada mal para una reina- me dijo Jenny mientras buscábamos a Einar y a Darek.

-Gracias- reí -no tuve piedad con el betún-

-Ni con los huevos- ambas nos reímos; llegamos al jardín y ambos estaban jugando, Einar cargaba y lanzaba a Darek -Tranquila majestad, es mi hijo no el suyo, trate de ser menos sobreprotectora- ví su mano en mi estómago deteniendome, yo estaba con un pie adelante, dispuesta a detenerlos.

-Perdón-

-No me imagino cuando tenga sus propios hijos-

-Trataré de no ser tan consentidora-

-Sí, siento que usted será la estricta y el rey Aker quien los consiente a escondidas- yo me sonrojé.

-¿Qué le hace pensar que tendremos hijos?-

-Bueno yo huelo a boda-

-No... para nada, solo tenemos una buena relación-

-Por eso lo digo- me codeo.

-Am yo...no quiero casarme- fui con los chicos, de lejos pude escuchar la risa de Jenny, yo solo me sonrojé más ¿Casarme? ¿En qué está pensando? Aún soy joven ¿Y que tal si no funcionamos Aker y yo como esposos? Sería interesante mencionarle a él lo que me dijo Jenny, solo informandole su comentario y ver como responde.

-¡Ana!- Darek se acercó a mí corriendo.

-Hola amor mío- lo cargué y estuvimos huyendo de Einar, jugábamos a qué quería atraparnos; así estuvimos bastante tiempo hasta que era hora de desayunar, pues Darek siempre era el primero en despertarse cuando era su cumpleaños; después del desayuno el abuelo Filip llegó, corrí a abrazarlo.

-Tranquila mi pequeña Carrot, podrías hacerme daño, recuerda que tú te vuelves fuerte y yo viejo- comencé a reír.

-No te imaginas lo mucho que te extrañé- no quería soltarlo.copy right hot novel pub