Entonces ¿me consideras una posible amiga?- ella asintió - pues yo ya te considero una- tomé un plato y serví 5 postres distintos perfectamente acomodados, a modo que cupieran sin que se cayeran al quitar alguno.
-¿Te gustan los postres?-
-Amo los dulces-
-¡Yo amo desayunar algo dulce! Am ¿Te gustan las aves?- yo asentí, tragué el postre que estaba comiendo.
-Tres de mis animales favoritos son aves- comí otro postre.
-¿Te gusta cabalgar?- dijo emocionada.
-Me encanta, mi caballo se llama siren- ella se quedó pensando un momento.
-¿Tu caballo es un Zaino negro azulado verdad?- yo me quedé perpleja, ni siquiera sabía que tipo de caballo era el mío -Qaysar, digo Aker me dijo que es un Zaino, pero por el nombre debe ser ese color- yo asentí.
-¿Le gustan mucho los caballos?-
-Sí ¿Que edad tienes?-
-18-
-Ay yo tengo 20, así que no me hables de usted, me siento vieja, eso déjaselo a Qaysar y a Brent-
-¿No son un año mayor que ust…?-
-Hablame sin formalidad, ya dije; además Qaysar se ve mayor con esa barba- yo me reí.
-Se ve bien, los hombres con barba se ven más elegantes- ella me miró, al parecer estando en desacuerdo conmigo, solo sonrió y miró al techo, como si pensará en algo.
-¿Que opinas del arte?-
-Yo pinto- estaba sirviendome más postres y me llevó casi a rastras hasta mi mesa.
-La amo, me la voy a quedar y Aker te agradezco por poder conocer a esta increíble chica- yo sin saber que estaba pasando solo seguí comiendo los postres.
-Disculpala, es que hemos sido sus únicos amigos desde la niñez y conocer a otra mujer la emociona- dijo el príncipe Felipe.
-No es cierto, nunca he conocido a una mujer como ella, así que los mataré si le hacen daño o la alejan de mi- entonces el rey Montecarlo, se acercó a nosotros para ver cómo estábamos pasando la fiesta; cuando el rey se fue la reina Margaret se acercó a mí a susurrarme al oido.
-Te vas a quedar ¿Cierto? Porque necesito que nos veamos más seguido y mañana tendré más tiempo para hablar contigo- me sonrió de una forma tan dulce que me sentí tan aliviada, tener una amiga nueva, que además de saber mi más grande secreto congenia conmigo; asentí con mucha felicidad.
-Vayamos a bailar, escuché que te pedí un baile antes que Frederick- yo estaba bebiendo agua, casi me atraganto cuando el príncipe Aker me dijo eso y se levantó, yo negué con la cabeza, él asintió y yo seguía negando, así nos la pasamos 5 minutos hasta que el principe Felipe me convenció.
-Ya estamos aquí-
-Le queda muy bien el rojo- al principio lo había tomado como sarcasmo, y me moleste, estaba dispuesta a contestar, pero lo ví sonrojado ¿Aker sonrojado? Hice sonrojar a un hombre mucho mayor que yo entonces, realmente debo verme excesivamente bien; Jenny me ha dicho que el rojo es uno de los colores que me quedan demasiado bien, pero nunca lo tome tan enserio hasta ahora.
-Gracias- entonces fue un halago de su parte ¿Un halago de su parte? Casi siempre bromea conmigo y me toma el pelo.copy right hot novel pub