-Oye no es un color horrible- me reí.
-Es rosa- ya estábamos en el carruaje e íbamos solos.
-Es bueno que Lena no tenga que venir en las celebraciones- dije aliviada.
-Vamos no es tan malo que esté con nosotros todo el tiempo-
-Mi mamá no tenía dama de compañía ¿Por qué debo tener una?-
-Todas las reinas deben tener una-
-Pero no la quiero cerca-
-Si la conociera mejor le agradaría bastante- Einar sonrió -además necesita una confidente que le entregue su total lealtad-
-¿Y tú no eres esa persona?-
-Si le soy leal, solo que necesita a una mujer que siempre pueda acompañarla y ayudarle en lo que necesite, hay cosas en las que no le puedo ser de ayuda-
-¿Por ejemplo?-
-Cuando no pueda cambiarse sola, bañarse, quiera algún postre, o ayuda femenina-
-Eso se lo puedo pedir a Jenny-
-Ella cuida a un bebé-
-Bueno en eso tienes razón, pero sigo en total desacuerdo- llegamos a la fiesta y nos sentamos en una mesa junto a Aker, la reina Marianne, Margaret y el príncipe Felipe, de lejos vi a Frederick sentado con su hermana menor, se veía tan tierno.
-¿Por qué lo miras tanto?- me susurró Aker.
-¿Qué? ¿Acaso estás celoso?- le sonreí de forma maliciosa.
-¿Quien dice?- Aker se volteo, pude sentir sus latidos aumentando, no parecía ser de emoción, moví la cabeza con desaprobación y me acerqué a Einar.
-Me pregunto qué dirán, pero es de mala educación escuchar conversaciones ajenas- le susurré a Einar.
-No debería, pero ahora también me metió curiosidad- le sonreí y agudice mi oído.
-Solo ríen y hablan del cabello de la princesa Mitchell, y están hablando de flores, que dulce-
-No es nada dulce, él es odioso- Aker dijo al aire.
-Entonces no es nada interesante- Einar se desilusionó.
-¿Cómo quieres que celebremos tu cumpleaños?- Aker puso su barbilla en mi hombro.
-¿Mi cumpleaños? ¡Mi cumpleaños! Lo había olvidado por completo ¡No puede ser cumpliré 21!-
-Tranquila, imagínate como me siento yo- dijo Aker.
-Es cierto tú cumples 24, ya estás viejo cariño- dije riendo, Aker solo se sonrojó porque le dije cariño y no pudo decirme nada, entonces llegó la nueva reina... Aatrox; me hirbió la sangre cuando la ví, aún no podía olvidar que había intentado hacerle daño a mi pequeño.
-Con ustedes la reina Diana Aatrox Gaifort- alguien la anunció y todos nos levantamos; ella traía un vestido morado con demasiados bordados de color amarillo, se veía como un trabajo de un año, no me sorprendería que ella les especificará cada detalle del vestido a las modistas, su cabello estaba trenzado y lleno de Lunarias, su corona era dorada, tan brillante que casi me deslumbra, sinceramente esperaba la extravagancia en su vestimenta, pero yo la imaginaba con plumas o algo por el estilo, más bien le quedaría perfecto un vestido verde así sería una víbora completa. Me miró de forma fija por unos instantes, estábamos viéndonos directamente.
-Ilinana ya puedes sentarte- me dijo Aker tomándome de la mano, lo miré y me senté; por estarla mirando olvidé sentarme de nuevo. Nos sirvieron la comida, todo estaba bien y tranquilo, hasta que me levanté con Einar a bailar, la reina Aatrox pidió que habláramos un momento fuera del salón.
-¿Qué quieres? ¿Te disculparás por lo que hiciste? Aunque una disculpa no hará que lo olvide- le dije estando afuera.copy right hot novel pub