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Quédate, no huyas

Capítulo 10

Aurora.

Ayudé a ese idiota y ni siquiera me agradeció, podría perder el brazo, si no lo ayudaban pronto, me alegro de haber tomado un curso de enfermería, sé mucho sobre esta área... No sé no se con que trabaja el señor ferrari pero debe ser algo muy peligroso, cuando le pedi que se quitara la remera me quede paralizado de lo mucho que se definieron sus abdominales, me quede sin palabras pero no lo mostre, luego lo ayude , y él grosero como siempre me pidió que me fuera, y yo por supuesto hice lo que me dijo y volví a mi habitación.

Me duermo recordando a Julia, estaría eufórica de que por fin le había dado una ayuda real a alguien.

Me despierto muy temprano, me baño, hago mi aseo personal, me pongo el uniforme, que es demasiado corto, ojalá pudiera quejarme de eso con ese idiota.

Encuentro a Joana en la cocina.

__ ¡Buenos días!

Ella sonríe ante el apodo.

__ Buenos días cariño, eso me gustó, "jo" me hace parecer joven.

__ ¡Oye! Todavía eres joven, ahora que eres de mediana edad.

__ eres muy amable, hija.

Somos interrumpidos por mi "queridísimo" jefe.

__ Joana, mi café por favor.

__ por supuesto señor.

Mientras Joana sirve el café, él insiste en molestarme.

__ y vas a limpiar insolentemente mi cuarto.

__ Voy señor.

Voy a su habitación, entro y empiezo a limpiar su cama y como siempre desordenada, noto que tiene su camisa, de repente se me pasa por la cabeza una actitud muy estúpida, decidí oler su camisa, y yo lo hizo, y su olor es maravilloso, pero me detendré pronto, me daría un infarto si me sorprendiera oliendo su camisa, lo que es arrogante es fragante.

¡Hija mía, mira la vergüenza del amor!

Acomodo el tocador al lado de la cama, noto que tiene un dispositivo como un vibrador, lo tomo para revisarlo, lo estaba mirando cuando abrió la puerta me asusté y lo dejé caer.

__ quien te autorizó a revisar mis cosas.copy right hot novel pub

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