Sentada en el borde de la cama, Olivia le dio la espalda a la puerta, sin darse cuenta de la figura indiferente de pie fuera de la puerta.

Sosteniendo el móvil con una mano, mientras responde.

—Hermana... no te preocupes, no me puede gustar el cuñado, y la persona a la que ama el cuñado eres tú...

Era imposible que le gustara su cuñado... especialmente cuando ella lo llamaba cuñado...

Esta frase cayó en el oído de Lucas, y sin duda cada palabra lesionó su corazón.

—Hermana... Cuando salgas de la cárcel, el cuñado definitivamente se casará contigo... Para entonces tendréis dos bebés, uno se parece a ti y el otro se parece al cuñado, y daréis celos a los demás.

Olivia apretó la carcasa del móvil con fuerza, una vaga niebla se elevó en sus ojos y su garganta estaba bloqueada.

Sólo entonces supo que era tan doloroso decir una mentira contra el corazón.

Levantó la cara inconscientemente y se obligó a volver a las lágrimas, temiendo que su hermana oyera su voz ahogada.

—Ya está... Hermana, no te lo diré más, todavía tengo cosas para hacer, e iré a verte otro día —Olivia resopló, colgó la llamada a toda prisa y su corazón cayó en la cueva de hielo.

La calefacción en la habitación estaba encendida pero todavía sentía frío por todas partes.

Enganchó la comisura de la boca, dijo que no le gustaba Lucas, sin embargo, ¿cómo podría no gustarle?

Al momento siguiente, la puerta se cerró de golpe y golpeó la pared.

Detrás de ella llegó una voz masculina que hizo temblar a Olivia.

—¡Olivia!

La palabra casi salió rugiendo de los dientes del hombre.

Olivia se sorprendió, miró hacia atrás y se encontró con los ojos helados del hombre.

Su corazón latía salvajemente

Justo antes, en la puerta, ¿cuánto había escuchado...?

—Lucas... ¿Cómo puedes escuchar mi llamada en secreto?

Ella se mordió el labio, volvió la cabeza y lo miró fijamente, y finalmente decidió hacerlo de forma preventiva.

—¡Je! Si no subiera amablemente a llamarla para desayunar, no lo sabría todavía, mi señora Montenegro, me ponen los cuernos.

Hubo una mueca de desprecio en la comisura de la boca de Lucas, era obvio que estaba sonriendo, pero parecía ser extremadamente peligroso.

¡Olivia se quedó sin habla.

Originalmente, entre ella y Lucas, era sólo un matrimonio deformado.

—¿No dijiste que no te gusta tu marido? ¿Dijiste que ya tienes novio? Ahora, ¿por qué te vuelves muda?

Lucas entró en el dormitorio mirando a Olivia con ferocidad.

—De todos modos, lo escuchaste, ¿qué más quieres preguntar? —Olivia frunció el ceño, pellizcando sus dedos, con el corazón dolorido casi goteando sangre.

Lo escuchó todo... De todos modos, tarde o temprano se iban a divorciar, de todos modos, su imagen en su corazón ya era tan mala, y no tenía miedo de agregar este crimen.

—Tu supuesto amor es Arturo, ¿no? —Lucas la miró directamente y burlándose.

—Piensa como quieras, a tus ojos, soy una puta, ¡cómo podría tener sólo un amante Arturo! ¡Tengo muchos más amantes!

Ella tembló, su corazón se apretó, y dolía varias veces más que cuando llamé a Aurora hace un momento.

Lucas entrecerró sus ojos fríos y miró a la mujer que ya había ocupado todo su corazón, que estaba tirando con fiereza.copy right hot novel pub