Ha pasado un mes desde que me he enterado sobre aquel chico llamado Sebastián, en tan poco tiempo no creí que las cosas se complicarían, sin embargo, hemos recibido noticias de que él se ha enterado de mi existencia y pretende "rescatarme" de las garras de los Daniels, no sé cómo, pero siento que ese sujeto cree que me han mantenido secuestrado todos estos años.
No entiendo por qué muestra preocupación por mí, no nos conocemos, por mi parte no hay un cariño hacia él, por ello es difícil creer que él si tenga sentimientos por mí, sólo que no creo que pueda sentir lo mismo, hasta ahora sólo me ha causado problemas, de hecho, tendré que mudarme al departamento que mi suegro me proporcionó aquella vez en la que Jack y yo terminamos.
No quisiera mudarme, estoy muy feliz viviendo con mi esposo, despertar cada mañana a su lado es algo dulce y especial, me encanta tenerlo a mi lado al dormir o despertar, sólo que su padre nos sugirió distanciarnos por un tiempo, ya que Sebastián tiene la idea fija de lastimarlo a él ¿por qué? Porque cree que sólo estoy a su lado por miedo, casi diría que, contra mi voluntad, por ende, como una forma de disipar aquel pensamiento, mi suegro nos ha propuesto esta solución.
Por supuesto que ninguno de los dos quería, Jack fue el primero en oponerse debido a que no deseaba dejarme solo, sin embargo, si yo continuaba a su lado aquel sujeto que se hace llamar mi hermano lo buscará hasta hallar con mi esposo. No podía permitir que lo lastimaran por mi culpa, así que nos distanciamos e implantamos el rumor de que jamás hemos estado casados, esto con tal de confundir la información que Sebastián ha recibido sobre nosotros.
Lo malo es que extraño a Jack, hace dos semanas que no nos vemos, hemos hablado cada día a ciertas horas, ambos nos extrañamos, aunque no sé si es buena idea recibirlo en mi casa, sé que tiene ganas de verme, incluso hacer aquellas cosas que normalmente hacíamos cuando estábamos juntos, ya sea coquetear, besarnos, salir a citas, pero ahora mismo debo aparentar llevar una vida diferente, aunque he vuelto a tener a titán detrás de mí.
Como estoy de vacaciones, él se encontraba haciendo otro tipo de trabajos, pero debido a que se ha presentado este problema, varios hombres se aseguran de que yo me encuentre protegido, titán es quien pasa todo el día conmigo, sin embargo, hay otros sujetos que me siguen de cerca, ni siquiera los he visto, bueno, sólo la primera vez cuando nos presentaron, aquella vez deseaban que supiera perfectamente a quien seguir para no repetir lo mismo de la última vez, sólo que no los he vuelto a ver debido a que se mantienen ocultos para no levantar sospechas.
Hoy me siento un poco triste, no he podido hablar con mi esposo durante todo el día, me gustaría saber sobre su día, incluso saber que ha hecho durante estos días, pero no me ha llamado, sé que debemos ser discretos, sin embargo, una llamada me haría el hombre más feliz del mundo. Ahora mismo me encuentro solo, titán se fue hace poco, suele irse durante la noche, aunque los otros sujetos permanecen cuidando que nadie externo se acerque.
Quizás por eso no sentí desconfianza cuando tocaron el timbre, creí que se podría tratar de uno de ellos, sólo que para mi sorpresa frente a mí se encontraba un hombre guapo que deseaba verme, lo bonito es que traía un ramo de rosas y una hermosa sonrisa que se vio reflejada en mis labios tras ver a mi esposo.
–¡Amor! –dije con felicidad mientras él entraba.
–Toma– me dijo entregándome el ramo de hermosas rosas de color rojo–no pude aguantarme otra semana sin verte– agregó rodeando mi cintura luego de yo recibir el ramo.
–Te extraño mucho– le confesé rodeando su cuerpo con mis brazos– realmente quisiera que todo esto se acabe.
–Deseo lo mismo– me aseguró acariciándome– aunque te tengo una buena noticia.
–¿Cuál? –quise saber, para esto me alejé un poco con tal de verlo directamente a los ojos y este tomó una tarjetita que estaba en el ramo de rosas.
Yo dejé las rosas sobre la superficie de un mueble, estaba muy emocionado por ver que contenía aquel pequeño sobre, aunque sentí como mi mirada resplandecía tras ver dos ecografías que anunciaban que nuestros bebés se estaban desarrollando apropiadamente.
–¡Qué hermoso! –dije tras tener las ecografías en mis manos– amor, esto es increíble.
–No quería decírtelo por teléfono, así que por eso no te he llamado, quería sorprenderte– me comunicó acariciando mi mejilla con ternura.
–Deberíamos celebrar...–dije sonriendo con cierta malicia.
–Sí...–se acercó a mis labios– también he venido a eso...–agregó besándome de forma dulce a medida que me dirigía hasta la habitación mientras yo simplemente me dejaba guiar por sus espectaculares y seductores labios.
Hacer el amor se volvía más espectacular ahora que han pasado varios días desde la última vez que lo hicimos, incluso los besos tenían un toque diferente con el que mi cuerpo se estremecía.copy right hot novel pub