"Hazlo"

"Mátalo"

"Demuestra tu poder"

Las voces la atormentaban nuevamente.

Frente a ella yacía un tipo a quien debía matar, él rogaba que no lo lastimará.

Pero estaba indecisa.

Matarlo o dejarlo vivir.

Era una prueba.

Leopoldo quería saber si era fuerte o no.

-Vamos Yanet, demuestra tu fuerza - Amelia gritó

Yanet yacía dentro de un círculo rojo, las reglas eran:

1) No salir del círculo mientras peleas.

2) Gana el que queda con vida.

3) No hay rendimiento.

4) No hay piedad.

-Sin piedad - dicto Amelia

Pero Yanet seguía pasmada.

-Por favor, por favor, por favor. Se lo ruego, tengo una familia. Por fa… - antes de poder completar la palabra, Amelia tomó su espada y le atravesó con está el pecho al hombre. Y con fuerza la retiro para dejar el cuerpo inerte tumbado en el piso lleno de sangre.

-¡Sin piedad! - gritó Amelia, con su espada ensangrentada señalo a Yanet - ¿Acaso no aprendes? Necesitamos personas duras, sin piedad, sin remordimiento, sin sensibilidad, no necesitamos débiles ¡Y tú lo eres!

-¿Para qué? no siento mi poder - susurró débilmente Yanet

-¿No lo sientes? - sonrió Amelia, tiró su espada al piso y esta fue recogida por un guardia. Con una sensualidad desbordante Amelia acomodó su descarado escote y camino elegantemente hasta quedar a dos metros de Yanet - patética, con razón tu hijo murió y tu amado está a punto de morir

-¡Eso no es cierto! - Rugió Yanet

"Muerte"

"Tú eres la culpable"

"Sálvame"

"Véngame madre"

"Véngame"

-¿Escuchas las voces? - Amelia colocó su mano derecha en su cintura - ¿qué te dicen?

-Muerte, venganza - lágrimas caían por las mejillas de Yanet

-Entonces hazlo y demuéstrame tu poder - al susurrar lo último, Yanet levanto la mirada y la mantuvo fija en Amelia. La mirada de Yanet se oscureció y una macabra sonrisa se formó.

-Juguemos - susurró Yanetcopy right hot novel pub