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Una madre para mi hijo

CAPÍTULO 7. AMENAZA

-Señorita la cena ya está lista, el señor Massimo la está esperando -.

-No tengo hambre, comí demasiado esta tarde -Le miento la verdad es que muero de hambre, pero no quiero ver a Massimo después de lo que sucedió esta tarde -Mia por favor cuando Alex quiera dormir lo puedes traer y por el momento que nadie me moleste -.

-Lo siento señorita el señor Massimo dijo que hoy él dormirá con Alexandre -Responde con tono apenado.

-Perfecto en ese caso puedes retirarte, quiero dormir, nos vemos mañana -.

-Hasta mañana señorita, que descanse -.

Me levanto de la cama y decido cambiarme para estar más cómoda, me vuelvo a acostar y abrazo una de las almohadas mientras vuelvo a llorar.

Massimo

Esta mujer me vuelve loco de una y mil formas y cuando pienso que por fin podré hacerla mía sin previo aviso se aleja de mí sin darme ninguna explicación del porque su cambio de actitud, sin pensarlo le doy a entender que ella había venido hasta a mí buscando placer y puedo ver como su cara se transforma al escucharme decir esto, me grita que ella no es ninguna de las mujerzuelas con las que me acuesto así como que tampoco es mi amante en turno, después me suelta una cachetada tan fuerte y sale corriendo de mi habitación sin que pueda detenerla.

Ahora me siento como un verdadero imbécil al recordar lo que Franco me contó sobre la pelea de Fiorella y Lilibeth, por supuesto que con lo que le dije hace un momento piensa que solo quiero divertirme con ella un rato y la verdad es que cuando la vi por primera vez ese fue el primer pensamiento que cruzo por mi mente, sin embargo, en este momento no sé si solo la quiero para un rato o para algo más.

Por la noche pido que la manden llamar para cenar, pero estoy seguro de que rechazará cenar conmigo también les informo que le digan de que hoy Alexandre dormirá conmigo tal vez de esta forma salga de su cuarto por lo menos para despedirse de mi hijo y tenga oportunidad de hablar con ella. Después de unos 5 minutos Mia me informa que no cenará conmigo tal como sospechaba y que pidió que nadie la moleste.

Al día siguiente estoy con mi hijo esperando que nos sirvan nuestro desayuno cuando la veo bajar, ya cambiada se dirige a mi hijo le da un beso en la frente y a mí me ignora por completo cuando trato de entablar conversación con ella así que me doy por vencido.

-Señor, la señorita Fiorella ha llegado, lo está esperando en la sala -Me informa Pietro.

-Gracias, dile que voy en un momento -Doy un último sorbo a mi café y salgo de ahí.

-Hola Massimo te he extrañado mucho espero que tú también -Dice Fiorella con tono sensual.

-Hola Fiorella, te mandé llamar no porque te extrañé, quiero advertirte algo y déjame ser bastante claro no quiero que vuelvas a molestar a Lilibeth ella es la señora de esta casa, la próxima vez que me enteré de que intentas humillarla será lo último que hagas en esta vida ¿Soy claro? -Veo como su expresión cambia de sensualidad a miedo total.

-Pero Massimo como puedes fijarte en una tipa como ella que seguramente solo está tras tu dinero, en cambio yo te amo-.

-No me hagas reír Fiorella, como es posible que me ames cuando solo salimos dos veces y para tu información ella no está tras mi dinero soy yo quién no la quiere dejar ir ¿Eso te dice algo? Ahora largo de aquí. Otra cosa recuerdas el caso muy sonado de la mujer que se encontró en la plaza hace unos días -Ella solo asiente haciéndome sonreír ante su miedo -Pues bien, esa mujer se atrevió a tocar a la señora de esta casa y ve como terminó, ya sabes lo que te puede suceder si continúas molestando a mi mujer -Pido que mis hombres la saquen de aquí y me dirijo a mi oficina.copy right hot novel pub

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