ERICK
Durante días y meses trate de encontrar mi estabilidad emocional, dejando atrás mis temores de no decirle la verdad de las cosas, y no era porque no quisiera confesarlo, si no al contrario. No quería que saliera más lastimada de lo que ya había salido, ella solo necesitaba una vida tranquila y llena de dicha y felicidad.. algo que siempre estuve dispuesto a ofrecerle desde que la conocí.
Y así es, no puedo decir si me enamore a primera vista, pero lo que si tenía seguro desde el principio, era ella. Conocerla y tenerla en mi vida. Desde que vi ese brillo en su mirada y esa sonrisa resplandeciente, fue como una luz, una que le había echo falta a mi vida y que debía quedarse para siempre, porque era lo que esperé por mucho tiempo. Y ahora se había convertido en mi mayor anhelo y en lo que más quiero.
Pero me estaba matando lentamente verla así, es lo que más temía. Sabía que tarde o temprano se enteraría, que si no era por mi lo sería por alguien más, y aún así me arriesgué. Esperaba la oportunidad para confesarle todos mis oscuros secretos y los que tenían mucho que ver con ella.
Pero no lo hice, y alguien más se me adelantó, haciendo que ella vuelva a desconfiar de mí. Desde el principio debí ser sincero, aclarar todo, pero no quería que se enterara de algo doloroso que la dejaría desbastecida y decepcionada consigo misma.
Así que opté por confesar solo lo de nuestro encuentro y como se fueron dando las cosas antes de que ella me conociera y después de ello. Lo otro lo dejaré para más tarde, cuando esté lista para asimilar lo de su padre. Quién era yo para negarle esa verdad, absolutamente nadie, pero aún así quería protegerla de eso y de su desgraciado tío.
Tengo mis sospechas de que él sea el que esté detrás de esto. Ella aún no me ha dicho quién le contó eso, pero tengo por seguro que fue él. Se que fue invitado a este evento, y al igual que todos los empresarios prestigiosos y de buenas familias están presentes, él también debió haber asistido esta noche.
—Jamás quise entremeterme en tu vida y ni mucho menos controlarla —digo en un tono calmado, necesitaba tranquilizarme.
Quería acercarme a ella, pero seguía sin permitírmelo.
—¿A no?, ¿y qué significo todo lo que hiciste? O quizás todavía lo sigues haciendo.
Niego, debe saber que nada de lo que hice fue con malas intenciones.
—No, solo fue en ese momento, después de conocerte todo fue cambiando, quizás si hice una que otra cosa sin tu permiso pero..
Luciana me interrumpe.
—¿¡Pero qué!? —inquiere en voz alta.
Esta muy molesta, puedo notarlo en sus ojos y en su tono de voz.
—Se que fue un idiota, se que estuvo mal averiguar de tu vida y meterme en ella. Pero todo lo hice por solo un razón, una muy grande e importante —hago una pausa y tomo algo de aire, me había alterado un poco cuando respondí —Debes saber que todo lo que hice y haga es por ti, por verte feliz, por darte una pequeña luz entre tanta oscuridad, algo que tu hiciste conmigo en cuanto llegaste a mi vida.
No dice nada solo se limita a mirarme. No sé si esta procesando todas mis palabras y quizás este pensando en cómo bofetearme por imbécil. Me lo tendría muy merecido.
—Nunca quise lastimarte, mi intensión siempre fue hacerte sonreír y que olvidaras tus problemas por unos momentos. Quise facilitarte el mundo, un gran error mío lo sé —se aceptar mis errores, pero aún así seguía pensando que ese no fue ninguno —Y aunque así lo fuera, no me arrepiento de haberlo hecho, lo haría muchas veces más, tantas que ni alcanzaría en vida para seguir haciéndolo, y solo para ver esa hermosa sonrisa deslumbrar
Su semblante se suaviza y su cuerpo delicado comienza a temblar, se encontraba cabizbaja. Se le escapa un sollozo y sin pensarlo me muevo para acercarme a ella y tomarla entre mis brazos.
La rodee, creí que me rechazaría pero no fue así, se dejo abrazar y acurruco su cabeza en mi pecho. Sentí como su cuerpo se estremecía más y comencé acariciar suavemente su espalda para tratar de tranquilizarla.copy right hot novel pub