Elio entró por la puerta e Irene se acercó con unas zapatillas.
Elio no se movió y la interrogó:
—¿Qué te pasó hoy?
—Entra primero.
Esto no era algo que se podía explicar con una frase, e Irene le acercó las pantuflas.
Elio resopló con frialdad, pero quería escuchar su explicación.
¿No era sencillo comer con Cynthia?
¿No podía hacer bien ni esto?
Entró en casa y se sentó en el sofá.
—Adelante, ¿qué pasó?
Irene se sentó en una posición más baja. Reflexionó durante mucho tiempo desde que regresó de la tienda de ropa en cómo decírselo a Elio.
Pero, cuando tenía que decirlo, no sabía cómo abrir la boca.
—¡Pero habla!
Elio estaba un poco impaciente.
—Creo que es una buena chica y no pude...
Dijo Irene.
Se le marcaron las venas en la frente de Elio, reprimió su tono y dijo:
—¿Entonces no la invitaste a salir?
Irene lo miró.
—Sí, conoces el carácter de Alain. Una vez que sepa lo que has hecho, su relación contigo definitivamente se deteriorará. ¿No te importa su actitud hacia ti?
Irene conocía a Elio y sabía que se preocupaba mucho por Alain.
Pero también sabía que el 80% de esta preocupación se debía a Fernanda.
—Creo que deberíamos contárselo a Alain y dejar que hable con Cynthia. No deberíamos involucrarnos en este asunto...
—¿Sabes que Cynthia sabe hacer la gasa de nube cantonés?
Elio estaba realmente impaciente e interrumpió a Irene.
¿Acaso no lo sabía?
¿No lo había pensado?
Irene se congeló. ¿Cynthia sabía hacer la gasa de nube cantonés?
¿No era una técnica personal de la familia Carpio? ¿Cómo se lo enseñaría a Cynthia?
—¿A quién se lo escuchaste?
Dijo Irene con incredulidad.
Elio suspiró.
—Lo averiguó la gente que envié a la Ciudad Blanca. ¿Crees que no sé los pros y los contras de este asunto? ¿Cómo va Alain a no saber que Cynthia sabía hacer gasa de nube cantonés con lo inteligente que es? ¿O crees que Cynthia podía ocultárselo?
Los ojos de Irene se abrieron más por la sorpresa.copy right hot novel pub