Aquella mano apartó el flequillo de su frente y ella supo lo que este hombre quería hacer sin importar que tan estúpida fuera.

- Sr. Venancio, ¿no sabes cómo respetar los sentimientos de los demás?-

- ¿ Los demás?- Los delgados labios de Venancio se movieron un poquito. - ¿ No me has dicho que eres solo una perra que puede hacer todo lo que sea por dinero? -

Aunque no soy de País H, he escuchado un dicho que proviene de allá LA CASTIDAD NO CUENTA SIENDO PROSTITUTA, ¿Cierto? -

De repente ~

Denis sintió un dolor repentino en su corazón, y luego se rió de sí misma ... Todavía estaba demasiado frágil. Ya reconoció que era una perra y que seguía siendo muy melindrosa.

Pero su manos presionadas contra su espalda ya estaban apretadas con fuerza, y en este momento no se dio cuenta del dolor de la penetración de la uña en su palma.

- Por aquí no. - Ella lo miró obstinadamente con los ojos inyectados en sangre sin parpadear. - No.-

- ¿Y si voy a hacerlo? -

Denis bajó los párpados y no dijo nada ...Venancio solo sintió que esta mujer estaba como resplandeciendo por todas partes en este momento ... ¿Cómo podría haber una mujer así en este mundo extremadamente humilde pero orgullosa?

¿Qué fue lo que hizo a una mujer así?

Al principio le hizo sentir a uno que era una mujer aburrida y cursi, y no tardarías en descubrir su encanto despampanante que había en ella haciendo que uno se volviera loco.

Sus labios tocaron ligeramente la cicatriz, Venancio claramente sintió que todo el cuerpo de esta mujer se tensaba, y que la piel debajo de los labios también se veía como así ... ¿Qué le pasó exactamente a su herida?

A fin de cuentas, quién le causó esta herida ... Si él también pudiera marcar una herida tan inolvidable en su cuerpo que ni siquiera se podría tocar, sería genial.

La palma de Denis estaba más apretada y sus uñas penetraron profundamente en su palma, la sangre se desbordaba gota a gota ... cayendo al suelo.

Venancio finalmente soltó a Denis.

- ¡Un plaf!-

Una bofetada en la cara se escuchó particularmente resonante en este pasillo nocturno.

La cara de Venancio se apartó hacia un lado por un largo rato, lentamente levantó su mano y se tocó su mejilla con incredulidad, - uffffff ~ -

- Lo has hecho bastante fuerte -.

Las palmas de Denis estaban temblando, pero sus ojos se veían firmes y parecía haber logrado un placer por la venganza

-Al Sr.Venancio te gusta tanto echar sal en las heridas de otras personas, y ahora deberías saber que echar sal en la herida le duele a uno-.copy right hot novel pub