Celia levantó la cabeza y miró a la mujer del coche.

—Cómo sabías que estaba aquí...

—La Ciudad Sur es mi ciudad natal, me lo conozco demasiado bien.

El tono de Paula seguía siendo poco amistoso, pero la mirada que le dirigía era menos hostil.

Celia se subió a su coche y Paula la llevó a una zona residencial de lujo.

—Esta es mi casa, puedes quedarte aquí por ahora.

Paula recibió con entusiasmo a Celia y luego le dio un pijama.

—Es nuevo, no lo he estrenado todavía.

Celia se sentía muy incómoda con la repentina preocupación de Paula y tenía un mal presentimiento.

—Si quieres decirme algo, simplemente dilo —Celia no recibió el pijama ya que no sabía cómo comportarse.

—No te pongas nerviosa. Eduardo no sabe que estás conmigo.

Las emociones de Celia cambiaron, pero siguió sin mover sus pasos.

Paula captó su mirada recelosa, cogió su mano y la sentó al sofá.

—Alejandro se llevó todo tu equipaje, ¿no?

Celia se sorprendió al escuchar sus palabras, «¿cómo sabía esto?»

—A la familia Jaramillo probablemente le tocará mudarse mañana, así que no tienes que temerle ni preocuparte por tu equipaje —Paula parecía haber adivinado la reacción de Celia.

—¿Por qué? —Celia estaba confusa.

—Le conté a mi primo lo que dijiste en la llamada de esta tarde, decidió darle una lección a la familia Jaramillo —Paula se encogió de hombros

Celia se levantó del sofá asustada. «No puedo seguir teniendo tantas relaciones con Eduardo.copy right hot novel pub