*Skyler*

Me echo en el sillón subiendo mis piernas sobre las de Caden, quien se encontraba al otro extremo de este.

Desde la mañana que ha estado conmigo, y tampoco ha tenido intensiones en irse desde que se fueron las chicas. No reclamaré. Después de todo, me encanta su compañía, sobre todo para estos días tan oscuros.

—¿Cenarás conmigo? —le pregunto. Este me mira con una pequeña sonrisa y asiente.

—Si me invitas, claro que sí —ríe y yo le miro con una ceja alzada— Anoche traje un trozo de pollo asado —me avisa— lo podemos recalentar y acompañarlo con verduras que te gustan —propone.

—Perfecto —me levanto y este se pone de pie para seguirme.

Cocinamos con alta música, y comimos mientras disfrutábamos de nuestra compañía en silencio.

Una vez listos, Caden lava los platos mientras yo guardaba algunas cosas que se habían quedado por ahí de la pijamada con las chicas.

Decido subir a mi habitación mientras mi novio hacia no sé qué cosa, y le invito por si quiere venir conmigo.

Tomo mi teléfono y frunzo el ceño al ver un mensaje de Summer.

"Ya basta de meterte en mi relación"

Frunzo el ceño por lo inesperado que fue, y decido llamarla para hablar como corresponde. Espero a que marque un rato, y corta. Intento nuevamente y está vez si contesta.

—¿Qué pasó? —es lo primero que dice al contestar.

—Uhm, yo debería hacerte esa pregunta —justo en ese momento entra Caden, y en silencio se sienta a los pies de la cama para mirarme— Ya entendí todo de que no me meta en tu relación, pero tú igual deberías entender que ahí no estás bien.

—Y dale con la cosa... —bufa— Mira, ya no quiero seguir discutiendo contigo por esto, así que podríamos dejar el tema y listo, me dejas hacer mi vida y hacer como yo, que no me meto en tu “perfecta relación” —dice lo último con burla.

—Si te lo digo no es en mala, Summer. Zain no te quiere como dice. Ya sabes que las acciones importan más que las palabras —empiezo a irritarme un poco. Siempre que tocamos este tema Summer se vuelve completamente terca, y sé que también yo, además de que mi paciencia de desvanece como una bomba de humo.

—¿Y qué sabes tú si la quiero o no? —salta por detrás Zain, por lo que supuse estaban juntos. Caden frunce el ceño. Porque sí, ya era consciente que estaba oyendo todo por la concentración de su mirada al cuadrito en la colcha de mi cama.

—Primero que nada, buenas noches —le molesto, y Caden niega con diversión.copy right hot novel pub